El año futbolístico para Cruz Azul se terminó al caer 1-2 ante Flamengo, en el marco del Derbi de las Américas en Doha. Ya eliminados del Apertura 2025, al equipo conducido por Nicolás Larcamón ahora le esperan unas merecidas vacaciones tras un año muy agitado, en donde levantaron la Concachampions.
En el cotejo ante el mengao hubo niveles muy dispares entre los celestes: por un lado, Gonzalo Piovi le regaló el primer gol a De Arrascaeta tras una salida pésima desde el fondo; mientras que Rodolfo Rotondi o José Paradela no pesaron lo suficiente para lastimar a los brasileños en la última línea.
Por otro lado, quien se llevó todas las miradas (más allá del golazo de Jorge Sánchez desde fuera del área) fue Jeremy Márquez, quien poco a poco se fue ganando la confianza del entrenador. Junto a Charly Rodríguez fue el encargado de custodiar la zona media, pero siendo clave en la generación de juego.
ver también
¿Se ganó el puesto? El nivel de Jeremy Márquez en Cruz Azul que ilusiona a la afición
Es por eso que no llama la atención los elogios que llegan desde Brasil para el ex futbolista de Atlas. Uno de ellos vino a través de Cristiano Oliveira, periodista que a través de su cuenta de X expresó: “Por cierto: Jeremy Márquez de Cruz Azul es un muy buen jugador“. Corto pero contundente, el halago se hizo oír.
Vale recordar que jugó los 90 minutos del encuentro. Su participación, aunque sin contribuciones directas en el marcador, estuvo marcada por una incidencia disciplinaria: el mediocampista mexicano fue amonestado con tarjeta amarilla al minuto 38 por una falta, siendo la única estadística oficial registrada en su desempeño durante la dolorosa derrota de La Máquina.
Jeremy Márquez, el motor del mediocampo
Con el balón en los pies, Jeremy no se escondió. Registró 56 toques de pelota, con una efectividad de pase del 84% (32 pases precisos de 38 intentados). Lo más interesante fue su capacidad para romper líneas bajo presión: completó 3 de 3 gambetas intentadas y generó 1 pase clave, buscando siempre ir hacia adelante según los valores de Dataref.
A pesar del resultado adverso, la actuación de Jeremy Márquez es una de las pocas certezas positivas que Nicolás Larcamón puede rescatar. Su despliegue físico y su claridad para distribuir el juego (15 pases precisos en campo rival) confirman que el mediocampista es una pieza inamovible en el esquema de La Máquina de cara a lo que viene.
