El torneo de Clausura 2020 de Liga MX está en una suspensión temporal y hasta nuevo aviso, decisión que tomaron los directivos del certamen como medida de precaución contra el contagio de coronavirus.

Las autoridades del futbol mexicano, sin embargo, pretenden que el torneo termine tal como estaba programado y ya están revisando las opciones para programar las siete jornadas restantes y lo que será la Liguilla.

Según reveló David Medrano en su columna de esta mañana en Diario Récord, la idea de los presidentes y dueños de clubes es terminar el semestre en seis o siete semanas: solo jornadas dobles y contando que, con partidos a mitad de semana, podrán terminar antes de la primera semana de junio.

Pero hay un gran problema, y es que están la Liga de Campeones de Concacaf y la Copa MX, ambas con mexicanos con partidos pendientes: mientras en la Concachampions a América y Tigres les resta el partido de cuartos de final de vuelta, a Cruz Azul le queda también la ida ante Los Angeles FC. También está pendiente la final de copa entre Monterrey y Xolos.

¿En qué complica Cruz Azul? Y es que mientras Concacaf no avise cuándo pretende reanudar la competencia, los dos partidos pendientes que tiene la Máquina retrasarían aún más los planes de Liga MX de retomar el torneo.