Cruz Azul terminó el partido de esta noche, ante los Tiburones Rojos de Veracruz, con un amargo empate sin goles. Aunque los Jarochos llevan 35 juegos sin conocer de triunfos, pareciera que el equipo de la mala racha eterna era la Máquina.
Sin embargo, Óscar Pérez vio el vaso medio lleno y aseguró que lo importante es no haber perdido hoy. El Conejo debutó como entrenador de porteros y vivió un partido de ensueño luego de ser ovacionado por todo el estadio en la previa del juego.
Para él, “obviamente todos salimos un poco cabizbajos porque no se pudo ganar pero acá lo más importante es que rescatamos un puntito y vamos paso a paso. Ojalá no decaiga el ánimo y a seguir adelante”, destacó.