Todavía los aficionados de Cruz Azul siguen festejando el histórico pase a las semifinales del Torneo Apertura 2024. Es que en el partido de ida ante Xolos de Tijuana habían caído 3 a 0, pero con mucho aplomo y personalidad lograron ganar con ese mismo resultado, aprovechando la ventaja deportiva.

Una de las grandes figuras de La Máquina en esa noche fue su capitán y bandera Ignacio Rivero, uno de los pocos sobrevivientes de la Novena del 2021. Su ingreso se dio a partir de la expulsión de Jorge Sánchez en la ida, parándose como lateral derecho para la sorpresa de propios y extraños.

Lejos de pasar desapercibido, el uruguayo se mostró muy activo y hasta logró abrir el marcador sobre el cierre del primer tiempo, cuando la desesperación comenzaba a decir presente en el Estadio Ciudad de los Deportes. Nacho lo gritó con alma y vida, mientras al mismo tiempo llevaba el balón hasta el círculo central.

Pero esta reacción no fue una más en Rivero, ya que minutos atrás había vivido un momento muy emotivo dentro del vestidor. En una nueva edición del Color es Azul, el CM de La Máquina mostró la intimidad en la previa del cotejo ante Xolos, en donde el ex Nacional de Montevideo se emocionó hasta las lágrimas.

Con lágrimas en sus ojos y una sinceridad absoluta, el dueño del gafete de capitán le dijo a sus compañeros: “Estoy orgulloso de cada uno de ustedes, no pierdan el hambre muchachos, la humildad, las ganas de triunfar, lo que nos trajo hasta acá, a seguir sumando, a seguir creciendo y el objetivo ya saben cuál es“. Para su suerte, esas palabras tuvieron el efecto esperado.

Nacho Rivero en el XI ideal de la Liguilla

Consumada la clasificación de Cruz Azul a las semifinales, Rivero fue elegido por la Liga MX para integran el once ideal de los cuartos de final de la Liguilla. El otro representante cementero fue Ángel Sepúlveda, autor del tercer tanto que le terminó dando la clasificación a su equipo. Ahora se viene el América, en una nueva edición del Clásico Joven.