(Incluye video) El 14 de agosto de 2004, Giménez debutó en Veracruz y dio inicio a una historia irrepetible de amor por nuestro país. Ya naturalizado, es el símbolo de un Cruz Azul con el que logró los únicos dos títulos de La Máquina en este siglo. Nadie hubiera pensado en verlo en La Noria cuando tuvo la playera del América. Pero las vueltas del futbol convirtieron a Christian Giménez en un referente de La Máquina, porque Chaco cumple una década en la Liga MX, y la mitad de ese tiempo vistió los colores de Cruz Azul. El 14 de agosto de 2004, Veracruz, con un joven Giménez en sus filas, enfrentó a Rayados para dar comienzo a una historia de amor irrepetible por México. Tras pasar por Independiente, Unión y Boca Juniors en Argentina, Chaco partió hacia el país al que adoptó como propio. “Mi hijo y yo tenemos la nacionalidad mexicana, mis dos hijas son mexicanas, sólo mi esposa aún no es mexicana. Somos muy felices acá, hemos decidido quedarnos a vivir en México porque somos felices. Fuera delfutboltenemos una vida bastante completa, soy chilango a morir”, dijo hace meses. “Cuando uno llega a otro país, lo primero que piensa es jugar y hacer las cosas bien. Cuando llegué aVeracruz nos adaptamos muyrápidoy estábamos muy contentos, creo que inconscientemente pensamos que nos íbamos a quedar mucho tiempo. La llegada a cada uno de los equipos donde he estado son los momentos más importantes y que me han marcado”, añadió. En 2010 llegó a Cruz Azul y tres años más tarde obtuvo la Copa MX, que le valió la llegada a la Selección Nacional, algo que recuerda con orgullo quien jugó 5 encuentros con el Tri. “Jugar en laSelecciónes lo más maravilloso que me pudo pasar. Unos años atrás estaba viendo un partido de la selección y dije: ‘sería lindo jugar en el Azteca frente a 100 mil personas’. A mí ya me tocó en mi primer partido oficial anteHonduras. Sé que no me tocó la mejor etapa con la Selección, pero haber disfrutado la experiencia, escuchar a la gente coreandotunombre en elAztecano se compara con nada”, indicó. A los 33 años y con la Concachampions bajo el brazo, Chaco acumula otros 6 títulos desde su llegada a México -uno con América y cinco con Pachuca-, pero su apellido está totalmente identificado con la familia cementera. ¡Por muchos años más! + Video: Chaco pensó en volver a Argentina, pero el amor por La Máquina pudo más.

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