Según reseñó ESPN, ya los jugadores saben la noticia. La marca de vehículos Mercedes Benz, uno de los nuevos patrocinadores de Cruz Azul, lanzó un incentivo al plantel: si se clasifican a la final, habrá un vehículo del modelo Clase C convertible para rifar entre los miembros del primer equipo.
“El director deportivo Ricardo Peláez y el director técnico Pedro Caixinha informaron al plantel sobre este incentivo antes de viajar a Monterrey para enfrentar la Semifinal de ida el miércoles en el Estadio BBVA Bancomer”, consignó el citado medio de comunicación.
Este incentivo le cae como anillo al dedo a un plantel que ha mostrado un grado de unión bastante alto a lo largo de un torneo Apertura que dominaron casi en su totalidad -solo en una fecha no estuvieron en la primera casilla- y en la Copa MX que ganaron precisamente en la sede del partido de hoy.
Aunque con o sin incentivo, el premio de poder romper la racha de dos décadas sin un título de liga en uno de los cuadros más importantes del país y del continente, parece más que suficiente. Y si luego queda la opción de ganarse un convertible del año, mucho mejor.
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