Robert Dante Siboldi no es un aparecido en la historia de Cruz Azul. Primero fue su portero entre 1992 y 1993, donde jugó 32 partidos. Once años más tarde, en 2004, el uruguayo regresó al club como entrenador de porteros, para luego ser DT de las fuerzas básicas, de la filial Jasso (con quien fue campeón de Segunda), de Hidalgo, e incluso interino del primer equipo en 2009. Se fue en 2011.

Dio la vuelta larga y pasó por varios clubes y en distintos cargos, antes de regresar a Cruz Azul como interino por el resto de la temporada en septiembre de 2019. A un año de su vuelta al club del que se enamoró, Siboldi reveló cuál es el gran sueño de su vida desde hace más de 30 años.

"Me tocó salir en 2010 y desde ese momento me fui con la idea de un día volver, pero no pensé que no se saliera campeón en este tiempo. De cualquier forma, estaba seguro de que cuando me tocara volver conseguiría el título que en ese entonces ya hacía mucha falta", explicó en plática con Diario Récord.

Respecto al día en que regresó a la Máquina en un momento tormentoso, Siboldi aseguró que "yo tenía que demostrar en el campo con el equipo, no podía salir a decir que era el indicado, tenía que ir revirtiendo esa idea que tenían de mí, entiendo que por ahí tenía como aval el título con Santos, pero de todas maneras a la gente no le llenaba eso y tenía que demostrar, pero en cada etapa de mi vida siempre he tenido que demostrar".

Sin embargo, una de las espinas que el uruguayo tiene clavadas con los cementeros es la del final del Clausura 2020, ya que el torneo fue suspendido con la Máquina superlíder y con una importante racha ganadora. "Ahora se nos cortó una buena posibilidad el torneo pasado, pero las ilusiones y la confianza siguen intactas, con el compromiso de que este torneo se pueda dar. Estamos preparándonos para esas instancias", agregó.

"A mí me hubiera gustado salir campeón el torneo pasado para tener esa tranquilidad, pero sé que los edificios más grandes se construyen desde los cimientos y ahí poco a poco se va construyendo este edificio, un equipo se arma desde abajo, en fuerzas básicas, desde una mística, un adn y eso se está generando, lamentablemente no hay tiempo por la ausencia de títulos", sentenció.