Una vez más Cruz Azul quedó afuera en manos del América, pero también repitió la misma fórmula que ocurrió durante 2024. Fueron errores meramente propios los que pusieron contra las cuerdas a La Máquina, empezando por el timorato planteamiento de Vicente Sánchez desde el inicio del juego.
El primer tiempo fue toda una orquesta por parte de los de André Jardine, quien observó todas las acciones desde el palco. El palo y las enormes atajadas de Kevin Mier dejaron su portería en cero durante los primeros 45 minutos, pero en el complemento fue donde sucedieron las cosas más trascendentales.
El gol de Lorenzo Faravelli en una jugada totalmente aislada ilusionó completamente a Cruz Azul, quien ya tenía un pie y medio en la gran final contra Toluca. No obstante, el portero colombiano tuvo un error garrafal tras cometerle penal al Búfalo Aguirre, y allí comenzó la debacle cementera.
Este tiro desde los once metros fue intercambiado por gol por parte de Henry Martin, pero posteriormente un tiro de esquina conectó la cabeza de Borja, con un Mier que nunca salió a cortar el centro. Al menos La Máquina tiene por delante la Concachampions, pero el golpe fue muy duro.