Javier Orozco surgió de las fuerzas básicas de Cruz Azul: vio su debut en 2005 con Isaac Mizrahi y alternó entre el primer equipo y la filial Hidalgo hasta su salida de la Máquina a mediados de 2013, cuando el equipo perdió la final del torneo de Clausura ante América. Sin embargo, Chuletita entró a la historia grande cementera.
En la Concachampions, Orozco ha anotado 24 goles, 23 de ellos con la playera de Cruz Azul, y en la actualidad es el máximo goleador histórico del torneo continental. En plática con Concacaf, el delantero del Tampico Madero aseguró sentirse orgulloso de haber ganado la Bota de Oro en dos ocasiones (2008-09 y 2010-11) y de estar en la cima de dicha tabla.
“Es algo muy maravilloso para mí porque jugar en la SCCL fue mi primera gran oportunidad. Es difícil de explicar, pero es maravilloso. Es donde me puse a prueba con mis goles. Fui el ganador de la Bota de Oro dos veces y con eso tuve la fortuna de jugar más en la liga con Cruz Azul en ese momento. Lo hice muy bien en la SCCL y eso me ayudó a jugar más en la liga”, detalló Chuletita en plática con Concacaf.
Además, y respecto a su récord, Javier señaló que“definitivamente creo que es un récord que se puede romper. Los récords están ahí para ser batidos, no son para siempre. Siempre habrá alguien que luchará por romper el récord y quien lo haga tendrá mi más profundo respeto y admiración. Creo que alguien lo hará y espero que sea otro jugador mexicano”.
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Orozco, además, confesó que aún ve videos del partido entre Cruz Azul y Real Salt Lake de 2011, cuando anotó cuatro goles contra el elenco de la MLS, tres de ellos en los últimos 15 minutos del encuentro, ya que fue uno de los días que más feliz ha sido.
“Es un gran recuerdo porque recuerdo que el campo estaba inundado, no podías jugar tan bien, y al final del juego nos estaban venciendo y logramos remontar. Fue un partido maravilloso. Si hubiera sido un empate, hubiera sido perfecto porque los dos equipos jugaron muy bien, pero terminamos ganando. Rompí el récord de goleo en la SCCL y luego terminé siendo convocado a la selección nacional de mi país, así que fue maravilloso y algo que siempre recordaré. Todavía lo veo en YouTube”, agregó Chuletita.
Para el jugador, haberse convertido en goleador de Concachampions significaba mucho más que entrar a la historia del certamen. “Sabía que si jugaba bien en la Liga de Campeones, tendría un lugar en la liga y así era. Marqué goles en la Liga de Campeones y comencé a jugar más en la liga y luego en la selección nacional. Eso me motivó. También me motivó jugar en otros estadios, ir a otros países, conocer esos lugares, jugar contra jugadores diferentes a ti. Esas son cosas que recuerdo y hasta el día de hoy me gusta ver los partidos de Concacaf”,sentenció.