En el fútbol, hay figuras que logran trascender el campo y se ganan un lugar especial en el corazón de la afición. Emanuel Villa es, sin duda, una de esas leyendas para Cruz Azul. Para los seguidores celestes, no solo fue un goleador implacable, sino también un símbolo de entrega y pasión. Su paso entre 2009 y 2012 quedó marcado por una conexión inquebrantable con la afición.
Pero más allá de su etapa vistiendo los colores de La Máquina, Tito Villa ha tenido recorrido por varios equipos del fútbol mexicano. Además, hoy en día actúa como comentarista de los partidos de la Liga MX, por lo que no es raro verlo expresarse sobre diferentes temas relacionados, mostrando además su perspectiva y cariño por los clubes que marcaron su carrera.
Recientemente, sorprendió a sus seguidores con un posteo en su cuenta de X, donde se refirió a la situación actual del Querétaro, otro club emblemático para él dentro de la Liga MX. En su mensaje, expresó alivio y esperanza tras la reciente venta del club.
“¡Gracias a Dios que finalmente se dio la venta! ¡El club no podía estar peor! ¡No dejaron ni migajas de lo que se construyó en años pasados de la mano de Grupo Imagen y directivos sumamente capaces que dieron excelente resultados! ¡Hoy las ilusiones se renuevan! ¡No nos falles, Innovatio Capital!”, expresó.
Si bien a algunos les llamó la atención, este mensaje no es casual. Tito no solo es un ídolo de Cruz Azul, sino que también tiene un vínculo especial con Querétaro, con el que hizo historia. Se convirtió en el máximo goleador de Gallos Blancos y ganó la Copa México en 2016. Es más, tras su retiro, regresó para dirigir la categoría Sub-15, reafirmando su compromiso con la institución.
El recuerdo de Tito Villa sobre su salida de Cruz Azul
El adiós del delantero en Cruz Azul previo al Clausura 2013 dejó una sensación agridulce, marcada por la falta de voluntad de la directiva para retener a uno de sus máximos goleadores. Aunque tenía un fuerte deseo de continuar escribiendo su historia con La Máquina, las negociaciones para renovar su contrato no llegaron a buen puerto.
El delantero, de 29 años en ese momento, buscaba estabilidad y condiciones justas, pero la propuesta del club no lo reflejaba así. En conversación con Yosgart Gutiérrez hace algún tiempo, recordó que pidió un acuerdo con una cláusula clara: si anotaba 30 goles en dos años, la renovación se daría automáticamente. Sin embargo, la directiva lo rechazó y terminó llegando a Pumas.