La noche para Cruz Azul en el Volcán empezó con muchas dudas, sobre todo desde la formación inicial planteada por Nicolás Larcamón. Es que contra todo pronóstico, el argentino decidió dejar en la banca a José Paradela, Charly Rodríguez y Luka Romero, entre otras de sus grandes figuras.
Con todo esto la iniciativa fue de Tigres durante casi todo el primer tiempo, o al menos hasta el gol de Juan Brunetta a los 27 minutos. Una desatención en el fondo celeste compartida entre Willer Ditta y Erik Lira lo dejó solo al argentino, quien recibió un exquisito pase del inexorable André Gignac.
Ya en la segunda mitad y cuando pasaba muy poco, el VAR decidió revisar una entrada de Joaquim sobre Gabriel Fernández, en donde se terminó cobrando penal. No obstante, el Toro anunció demasiado su remate a la derecha de Nahuel Guzmán, quien lo atajó para dilapidar las ilusiones cementeras.
