Cruz Azul visitaba el fin de semana a Pachuca en el regreso de la Liga MX. Para los cementeros, mucho había en juego. Pese a todas las adversidades que tuvo que afrontar en el Estadio Hidalgo, el equipo de Nicolás Larcamón no perdió la concentración y se pudo imponer para rescatar un nuevo y valioso triunfo (el sexto al hilo), para quedar como único invicto del torneo.

Previo al partido, la concentración del equipo cementero estaba más que lista. Los jugadores terminaban de aprontarse para saltar al campo, pero hubo un momento que dejó huella en todos: la arenga de Ignacio Rivero. El gran capitán cementero no solo habló de fútbol, sino de valores que definen la esencia de La Máquina: entrega, actitud y compromiso inquebrantable.

“Aquí y ahora, el hoy, vamos en lo que viene, el hoy es lo que importa”, expresó frente a sus compañeros, recordando que cada instante en el campo debe vivirse con intensidad. Su mensaje no fue solo palabras: es un reflejo de cómo se planta, luchando cada balón y acompañando a sus compañeros.

Principalmente, Nacho transmite liderazgo. Su arenga no solo motiva: transmite la mentalidad que debe tener todo el equipo. “Actitud, como digo siempre, no negociamos, luchamos cada balón, apoyamos siempre al compañero. Siempre nos apoyamos, no demostramos debilidad al rival. Convencidos, cabeza fuerte”, insistió, incluso cuando implique terminar con la cabeza ensangrentada, como le ocurrió ante Pachuca.

Es que en el Estadio Hidalgo, el uruguayo volvió a ser el corazón de Cruz Azul. Su entrega total, reflejada en cada acción, reafirma los valores que caracterizan al club. Los aficionados le reconocieron el coraje, la entrega y la pasión que pone en juego, recordando que se Cruz Azul se deja todo, sin concesiones.

Rivero, la figura del accidentado triunfo de Cruz Azul. (Imago7)

El mensaje de Nicolás Larcamón que marca el camino a seguir para todo el grupo de Cruz Azul

Luego de la victoria que marcó un hito en el arranque de La Máquina en el Apertura 2025, Nicolás Larcamón reunió al equipo en el vestidor y expresó un mensaje que refleja su postura hacia el vestidor para conseguir los objetivos. “Fundamental entender que esto es todos juntos… No son once de memoria, no son doce de memoria, es todos juntos, porque necesitamos la virtud de todos“, sentenció con orgullo.