Una curiosidad alrededor de Cruz Azul es que históricamente se ha fijado en futbolistas que destacan en el futbol sudamericano. Por supuesto, el sello que dejó Miguel Marín en la historia de la institución generó que haya un antecedente muy fuerte para confiar en esa clase de jugadores. Sin embargo, durante la Era Boing se contrataron a muchos elementos que llegaron como estrellas, pero que no pudieron estar a la altura de la playera celeste.

Uno de los casos que más recuerda la afición de La Máquina es el de Federico Carrizo, quien arribó a La Noria en 2015 y solamente duró unos meses en la Liga MX. El delantero argentino se había destacado un año antes con Rosario Central por su gran habilidad individual y por su llegada al área. Ese enorme rendimiento lo llevó a ser contratado por Boca Juniors, uno de los candidatos a ganar aquella edición de la Copa Libertadores.

La realidad es que el caso del Pachi Carrizo es muy similar al de Walter Montoya, debido a que nunca volvió a mostrar su mejor versión después de salir de Rosario Central. Lo que sucedió fue que el extremo por derecha no pudo asentarse en Cruz Azul ya que apenas disputó 4 partidos en donde solo sumó 213 minutos. De hecho, su único gol en México fue durante un encuentro de la Sub-23 del cual fue parte para ganar ritmo al no ser considerado para el primer equipo.

Evidentemente, al no haber mostrado un buen nivel en su llegada a Ciudad de México, el conjunto cementero tomó la decisión de no ejecutar la opción de compra que había en su contrato. De esta manera, el Pachi finalizó su cesión y regresó a Boca para que posteriormente sea vendido. A pesar de que se creía que su carrera se iba a arruinar después de esos sucesos, Carrizo tuvo un resurgir inesperado.

No estuvo a la altura de Cruz Azul y hoy es una estrella en Paraguay (Imago 7)

Federico Carrizo es una estrella del futbol paraguayo

Lo concreto es que el delantero de 33 años tuvo unos años muy oscuros en su carrera debido a que después de su paso por Cruz Azul, tuvo unas temporadas olvidables en Boca y Rosario Central. No obstante, fue en 2019 cuando fichó por Cerro Porteño cuando le dio un cambio rotundo a su vida futbolística. Y es que en Paraguay, el Pachi logró encontrar un lugar en donde su estilo de juego marca la diferencia dentro del campo de juego.

En el conjunto paraguayo ganó dos títulos de liga, Apertura 2020 y Clausura 2021, siendo la máxima figura de su equipo. En 208 partidos disputados con Cerro Porteño, Carrizo convirtió 24 goles y repartió 40 asistencias; por lo que es considerado una de las grandes estrellas de la liga. Aunque es verdad que el Azulgrana está lejos de estar en su mejor momento, no hay dudas de que es uno de los clubes más grandes de Paraguay y Sudamérica.