Uno de los objetivos principales de Cruz Azul en este mercado de fichajes ha sido la contratación de Alan Pulido, quien se encuentra en una situación muy particular en la MLS. A pesar de que es uno de los mejores jugadores de la presente temporada, su contrato finaliza en diciembre, por lo que su futuro es incierto. A raíz de esta situación, el conjunto de Ricardo Ferretti comenzó a trabajar en su llegada a Ciudad de México.
Más allá de que el club habría llegado a un acuerdo con el futbolista, Chivas también ha estado negociando con el delantero de 32 años. Aún así, el verdadero problema alrededor del fichaje de Alan Pulido es que el Sporting Kansas City no tiene intenciones de dejarlo ir. En lo que va de la temporada, lleva 7 goles y 1 asistencia en solo 16 partidos; por lo que es un jugador fundamental.
Cruz Azul no pierde la ilusión de fichar a Alan Pulido
Según informó Fernando Esquivel, Alan Pulido no respondió la oferta de renovación que le realizó Kansas City, por lo que actualmente puede negociar como agente libre. El verdadero plan del cuadro estadounidense es tratar de extender su contrato, pero en caso de no lograrlo, pretenden venderlo en este mercado de pases. De ninguna manera quieren que se vaya libre en diciembre, debido a que ahora podrían recibir un dinero interesante.
La realidad es que la situación de Cruz Azul es compleja, debido a que si no fichan a Pulido, da la sensación de que no contratarán a otro delantero. Esto se debe a que no cuentan con cupos de extranjeros para explorar otras opciones; y no hay atacantes mexicanos que se encuentren cerca. Si bien Roberto de la Rosa es un nombre que interesa, resulta muy complicado sacarlo de Pachuca.
Aunque todavía no han bajado los brazos por Pulido, lo cierto es que en ‘La Máquina’ son conscientes de que no resultará sencillo su fichaje. El Apertura 2023 ya comenzó y eso genera que sea aún más difícil su llegada, pero las siguientes horas serán claves. El que verdaderamente se encuentra en una mala posición es Kansas City, quien parece que podría quedarse con las manos vacías.