José Saturnino Cardozo es considerado por muchos, el mejor jugador en la historia de Toluca y uno de los mejores en la del fútbol mexicano, pero tuvo un gran paso por “La Máquina”.
El delantero paraguayo llegó a Toluca a mitad de la década de los 90 y logró consagrarse como uno de los jugadores más importantes en la historia del club, colaborando en la consecución de cuatro títulos del fútbol mexicano y convirtiéndose en el máximo anotador histórico de la institución con 258 goles, pero quizás uno de sus momentos más importantes, lo vivió con “La Máquina”.
Cardozo llegó como refuerzo para la fase final de la Copa Libertadores en su edición 2001, luego de que Cruz Azul consiguiera avanzar cómodamente en fase de grupos con 13 unidades.
La primer eliminatoria fue contra Cerro Porteño y en ella, anotó un par de veces para colaborar al marcador global favorable de 4-3 y ubicarse en los cuartos de final de la justa continental
El siguiente rival era el legendario River Plate y tras empatar sin goles en el Monumental de Buenos Aires, la eliminatoria se definió en el Estadio Azteca con un contundetente 3-0. Cardozo marcó el último gol antes de finalizar la primera mitad y sentenció el pase.
Posteriormente se enfrentaría con Rosario Central en semifinales y José Saturnino marcó el primer tanto de la eliminatoria, para que Cruz Azul definiera la llave desde la ida con ventaja de 2-0. La vuelta en el Gigante de Arroyito se empató a tres y “La Máquina” sería el primer equipo mexicano en llegar a una final de Copa Libertadores.
La final terminó por perderse en penales, pero Cardozo se mantiene en la memoria de la afición celeste que siempre aspiró a tenerlo más que como un refuerzo para Libertadores.
