El pasado viernes 22 de mayo, los dueños de clubes en México determinaron que lo mejor era cancelar el torneo de Clausura 2020 y que, cuando volviera el futbol, lo hiciera directamente en el Apertura 2020 para poder afinar los últimos detalles respecto a los protocolos que seguirá Liga MX en estos momentos.

Considerando que en Santos Laguna 15 jugadores dieron positivo en las pruebas de detección de coronavirus y en Chivas hubo un caso, la idea de los directivos es prevenir posibles nuevos contagios una vez que se retome la competencia.

El protocolo de regreso tiene seis claves importantes y que tendrán relación con la convivencia “pública” de los jugadores: la primera de ellas es que las concentraciones ya no serán compartidas: cada habitación recibirá tan solo a un jugador y no a dos como se acostumbraba.

A eso se suma que los viajes aéreos y terrestres tendrán un asiento vacío entre cada jugador para evitar contacto cercano. Y las comidas, tanto en los hoteles como en los recintos de entrenamiento, serán escalonadas: grupos de no más de 10 personas y separados por 45 minutos.

Además, los estadios estarán vacíos y con nadiemás que la gente estrictamente necesaria para la gestión del partido, por lo menos hasta la jornada 10. Luego de ese día se estudiará si pueden abrirse las gradas para recibir público.

El ámbito “físico” no queda fuera de este análisis, ya que de forma obligatoria todos los miembtos de los clubes deben usar tapabocas y gel antibacterial durante todo momento, excepto cuando salten a la cancha. Y considerando que la barba y el bigote, y el vello facial en general, pueden ser un foco infeccioso, se recomendará a cada persona que lo mantenga que se afeite.

Esto compartió el protocolo que seguirá Liga MX. (Foto: Esto en Linea)

Esto compartió el protocolo que seguirá Liga MX. (Foto: Esto en Linea)