Que sí, que no: El estadio Azteca no abrirá sus puertas en abril y se aleja la afición de Cruz Azul

“Que sí, que no, que nunca te decides”, cantaba la banda argentina El Símbolo en 2001. Y esa frase podría aplicarse perfectamente al futbol mexicano en la actualidad. Un día, el estadio Azteca está listo para abrir sus puertas. ¿Al día siguiente? Pues el recinto deportivo estará cerrado hasta que haya semáforo verde. Y todos los días una información distinta.

Hace unas semanas, Claudia Sheinbaum, jefa de gobierno de la Ciudad de México, aseguró que con semáforo amarillo podrían autorizar que los recintos deportivos (Azteca y CU) recibieran público en las gradas. Sin embargo, las autoridades de los estadios desmintieron esa información y confirmaron que ellos esperarían hasta que el semáforo tornara a verde para recibir a sus aficionados.

Este lunes, se regó como pólvora la información de que en la jornada 15 (17 de abril), el Clásico Joven entre América y Cruz Azul sería el que estrenara a los fanáticos en la CDMX. ¿El asidero? Las reuniones que han celebrado los directivos de ambos clubes y los encargados del estadio Azteca, en las que buscan tener todo listo en caso de recibir la autorización.

La columna del Francotirador de diario Récord aseguró que “es una realidad que en el Coloso de Santa Úrsula, especialmente, tienen juntas frecuentes para organizar a los equipos en caso de que llegue luz verde del gobierno de la CDMX para abrir, pero eso está muy lejos aún. Son reuniones de previsión, no quiere decir que ya va a suceder. Y otro dato matón: en CU van a regresar hasta semáforo verde, no antes”.

Además, el mismo columnista explica que hoy las autoridades prevén un aumento de los casos positivos de covid-19 en todo el país, después de la Semana Santa y del Spring Break, que ha repletado de turistas México en casi su totalidad.

“De entrada, se necesita un poquito de criterio para visualizar que después de esta Semana Santa volverá un pico de contagios en la capital; seguro viste cómo estaba el aeropuerto y las centrales de autobuses, y cómo se pusieron nuestras playas. Yo pongo la apuesta de que incluso vamos a cambiar de color, pero a rojo. Ojalá que me equivoque, pero con esas condiciones no van a abrir el Azteca y el Universitario hasta el final del torneo regular. Si es que abren”, sentencia.