La salida de Fernando Gago generó una crisis interna muy fuerte en Chivas que tuvo como consecuencia su eliminación en el primer juego del Play-in. Si bien es cierto que no era un candidato a ganar el Apertura 2024, en la plantilla hay individualidades más que interesantes. Ante este contexto, hay varios equipos que quieren aprovecharse para robarle a sus principales figuras.
Uno de estos clubes se trata de Cruz Azul, quien tiene en la mira a Roberto Alvarado para 2025. Debido a que todavía tiene en su poder el 50% de su ficha, Iván Alonso pretende llegar a un acuerdo con el Rebaño para contratarlo. Por supuesto que se necesitará bastante dinero para sacar al Piojo de Guadalajara, pero la institución cementera estaría dispuesta a invertir lo que sea necesario.
Aún así, David Medrano advirtió que esta será una de las grandes novelas del próximo mercado de pases ya que Chivas no tiene intenciones de negociarlo. El problema se encuentra en que el pase de Alvarado está dividido en partes iguales entre ambos clubes. Entonces, existe un conflicto de intereses muy importante ya que el Rebaño no quiere perder al futbolista, mientras que La Máquina quiere forzar su salida.
El factor que podría hacer la diferencia para que la operación se realice es la postura de Roberto Alvarado. Según informó Alejandro Ramírez, el Piojo le habría comunicado a la directiva de Chivas que su intención es continuar. De todas formas, esto no quita que Iván Alonso y Martín Anselmi aparezcan en la ecuación para tratar de convencerlo. Teniendo en cuenta que la liguilla acaba de empezar, se aceleraría por los refuerzos a partir de la finalización del Apertura 2024.
Cruz Azul también tiene en la mira a Chiquete Orozco
Con el objetivo de reforzar su zaga central, Cruz Azul también tiene la intención de contar con Chiquete Orozco a partir del 2025. A pesar de que esta es una operación más compleja al necesitar una inversión más grande, podría ser transferido por el precio justo. El defensa no vería con malos ojos llegar a La Máquina, por lo que esto ayudaría a que se concrete la transferencia.
La cláusula de rescisión del marcador central de 22 años es de unos 12 millones de dólares; pero Iván Alonso pretende ficharlo por menos dinero. En la misma línea, el plan es que la operación por Chiquete sea paralela a la del Piojo al tratarse de situaciones completamente distintas. De esta manera, el director deportivo tendrá que trabajar arduamente en Guadalajara para cumplir su objetivo.