La salida de Billy Álvarez de Cruz Azul es prácticamente un hecho, y si bien todavía no se confirma su carta de renuncia ni se sabe si podrá celebrarse la asamblea de socios del 26 de agosto, luego que las autoridades de la CDMX la cancelaran por peligro de contagios de coronavirus, los socios disidentes son quienes tomaron el poder, a pesar de las negativas de los socios activos.

Ante los sucesos extradeportivos suscitados los últimos días en torno a la Cooperativa La Cruz Azul, el caso judicial relacionado con Guillermo Álvarez y otros altos mandos de la cementera y del club de futbol, las redes sociales del equipo emitieron un comunicado.

En él, la Máquina reconoceal Consejo de Administración y Vigilancia, lideradopor José Antonio Marín y Víctor Manuel Velázquez, como “los nuevos jefes”, es decir, como los reemplazantes de Billy en la cabeza del club y con quien están trabajando codo a codo para dar los reportes del trabajo y quienes se hicieron cargo del proyecto deportivo.

“Nos mantenemos enfocados en trabajar para mantener los buenos resultados y corresponderle a nuestra gran afición su incondicional apoyo. Nuestro trabajo siempre se llevará a cabo respetando los valores y directrices, tanto institucionales, como legales”, comienza el comunicado de Cruz Azul.

Sobre lo mismo, añaden que “en este sentido, el Club se mantiene en coordinación y comunicación con los Consejos de Administración y Vigilancia de Cooperativa La Cruz Azul, que han priorizado en todo momento a los intereses deportivos de nuestra institución”.