Después del triunfo que la Selección juvenil de México obtuvo frente al equipo alemán, los reflectores están puestos sobre los jóvenes dirigidos por Raúl Gutiérrez. Francisco Flores, jugador de La Máquina Celeste, es uno de los hombres que forman parte de este equipo, que ha hecho soñar a la afición mexicana en la espera de obtener el campeonato de la FIFA, el próximo domingo en la cancha del Estadio Azteca. Tanto para Cruz Azul, como para su familia, es un orgullo que Flores esté sumando éxitos y, sin lugar a dudas, un título mundial sería un excelente preámbulo para una carrera que está iniciando con el pie derecho. Por Rocío Yelitza, para VamosCruzAzul.com