El ritmo inexorable de las contrataciones tiene que llevar un curso en Cruz Azul muy directo. La tendencia es que sólo se buscan futbolistas a los cuales se les ha dado un seguimiento de casi un año, aunque hay penosas excepciones como Ronald Raldes o Roberto Ovelar. Ahora el nombre que suena para Cruz Azul es Fabián Orellana, delantero chileno que también sabe jugar como medio creativo. Pertenece al Udinese de Italia en donde por el nuevo dibujo de la plantilla no tendría mucha actividad, por lo que pondrían su carta a préstamo a un bajo costo que le permitiría a Cruz Azul traerle el siguiente torneo. Un costo de 1.1 millones de dólares pagarían por el chileno de quien el director deportivo de la institución cementera, Alberto Quintano, se ha desvivido en su oficina particular viendo videos sin parar. Enrique Meza tiene en mente cubrir el hueco de la media de contención por el temor de no contar gran parte del torneo con Gerardo Torrado, ya sea por sus llamados a la Selección o suspensiones, pero también ha pedido llenar con más fuerza la media cancha en el aspecto ofensivo. El Monterrey, el semestre pasado, puso los ojos en Orellana que apenas tiene 23 años y que en su momento, el Colo Colo le despreció por su baja estatura, por lo que fue en el Audax Italiano con quien se dio a conocer en el medio futbolístico. El Niza también buscó sus servicios, pero al incrementarse el precio de su carta al anotar el gol histórico con el que Chile venció a Argentina en las presentes eliminatorias, desistieron de su intento. Fue el Udinese quien se lo llevó, pero no cree que tenga mucha actividad ahí, al menos esta temporada. Orellana vacaciona en Santiago de Chile y, además, trata de arreglar algunos problemas legales por no pagar la pensión alimentaria de su hijo. Sigue siendo una posibilidad muy fuerte para llenar la última plaza del equipo que trabaja a todo vapor en Avándaro como parte de su pretemporada. Foto: Mexsport Fuente: Excélsior