Cruz Azul es un equipo tan pero tan grande que en ocasiones, futbolistas que llegan con un gran cartel no logran rendir de la forma en que se esperaba. Casos hay de sobra: Desde Roque Santa Cruz, Teófilo Gutiérrez, Fernando Belluschi y tantísimos otros terminaron decepcionando a la afición y el entrenador de turno.

Dentro de ese grupo aparece también el recordado Alex Aguinaga, símbolo total del Necaxa en donde supo ser campeón en varias ocasiones, justo sobre el cierre de la década del ’90 y comienzos del 2000. Luego de esta epopeya, tuvo la dicha de dar el gran salto a La Máquina, pero el destino le jugó una mala pasada.

Solo permaneció en el elenco celeste durante 6 meses, en los cuales disputó apenas 14 partidos y no pudo anotar goles. Luego de ello, el ecuatoriano regresó a su país de origen para retirase en Liga de Quito en el año 2005, en donde sí pudo jugar activamente: 98 cotejos y 15 goles decoraron lo que parecía un triste final.

Sobre este tema en particular habló en las últimas horas con el periodista Adrián Esparza, en el canal de YouTube Nación Azul. Para sorpresa de muchos, su arribo a Cruz Azul no estuvo premeditado ni mucho menos: “Yo tenía una propuesta para ir al futbol ecuatoriano, pero era muy pronto para volver allí porque yo físicamente no venía bien, y en Ecuador me iban a exigir jugar“, comenzó diciendo.

Yo llego a la casa de Don Enrique Meza (DT de Cruz Azul por entonces) y le digo que me dé la oportunidad de hacer allí la pretemporada, sin más y para ponerme bien físicamente para volver a Ecuador. Él por ende me dice ‘déjame hablar con los directivos, no es mi decisión para yo poder decidir’. Días más tarde me llama para decirme que le dieron autorización y tuve que ir directamente al aeropuerto, para sumarme al grupo. Tenía solo intención de hacer pretemporada, nada más”.

Aguinaga y un flojo paso (Imago).

“Al llegar al aeropuerto ya la utilería me había preparado el bolso con el número 7 (mismo que Necaxa) y fue todo maravilloso, muy buen trabajo y un gran grupo con mis compañeros, en donde formé parte de juegos de pretemporada. Cuando todo terminó voy a hablar con Don Enrique para despedirme y agradecerle, pero me terminé quedando de forma permanente”, sentenció al respecto.

Aguinaga salió en defensa de Giakoumakis

El griego desembarcó en La Noria a cambio de 10 millones de dólares, pero sus problemas físicos le impiden jugar regularmente y eso levanta críticas. Ante ello, Aguinaga expresó: “Necesita tiempo. Todas las piezas son importantes y hay veces que lo que necesitas, lo tienes, pero necesita competencia, sin competencia te vuelves cómodo. No es fácil y el futbol mexicano es complicado, mucha gente cree que el futbol mexicano es fácil y que juegas como en Argentina, pero muchos argentinos vienen y les cuesta. Venir de la MLS no es fácil”, finalizó.