Una de las cosas que siempre tuvo en claro Iván Alonso en su llegada a Cruz Azul era que la presencia de Ignacio Rivero era fundamental para el desarrollo de su proyecto. Es por esa razón que se cortó rápidamente con el rumor que había surgido en diciembre sobre una posible salida. Si bien su figura creció a partir de la salida de Juan Escobar, el uruguayo siempre fue considerado como uno de los capitanes de la plantilla.
Además de su liderazgo dentro del vestuario, Nacho Rivero siempre lo ha representado en el campo de juego con un gran rendimiento. Independientemente de la posición que le toque jugar, el futbolista de 31 años consigue mostrar una gran versión. De hecho, desde la llegada de Martín Anselmi, el uruguayo se ha destacado como stopper derecho, un rol que no le había tocado asumir en toda su carrera.
Por supuesto, el hecho de que sea el único sobreviviente del título obtenido en 2021 genera que la afición le tenga un cariño muy especial. Incluso la voz oficial de Cruz Azul, Melissa Rivas, se atrevió a ponerlo en el ranking de los más queridos por el pueblo cementero. Entonces, la noticia de su renovación hasta 2026 significó mucho para la institución.
Más allá de que solamente le quedaban 3 meses para la finalización de su vínculo, nunca se dudó de su continuidad. La relación entre el futbolista y la institución es muy buena y la confirmación de su renovación solo era una formalidad. Resulta muy positivo que luego de varias salidas conflictivas con ídolos del club, Rivero pueda mantenerse dentro de la plantilla.
A raíz de esta noticia, en redes sociales comenzaron a llover mensajes de aficionados agradeciendo la decisión de renovarlo. El pueblo cementero está muy contento con los manejos de Iván Alonso, ya que en los últimos años han existido muchos conflictos con diferentes renovaciones. Los más recientes tuvieron como protagonistas a Jesús Corona y a Julio César Domínguez, quienes esperaban extender su vínculo y de última hora recibieron una negativa.