El Apertura 2025 marcó un antes y un después para La Máquina en la Liga MX Femenil. Con una campaña que rompió techos y llevó al equipo hasta semifinales por primera vez, el proyecto celeste dejó de ser una promesa para convertirse en una realidad. Ese crecimiento no solo eleva las expectativas, sino que también despierta una nueva ilusión.
El impacto deportivo viene acompañado de una transformación estructural. Cruz Azul Femenil deja atrás el jugar a puerta cerrada en La Noria y reclama escenarios acordes a su nuevo estatus. La Liguilla disputada en el Estadio Olímpico Universitario fue una señal clara: el equipo ya no podía pensarse como un proyecto secundario.

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Los importantes refuerzos que suma Cruz Azul Femenil para el Clausura 2026 hasta el momento
Con el Clausura 2026 en el horizonte, la directiva encabezada por Víctor Velázquez dejó en claro que el objetivo es ambicioso. No se trata solo de competir, sino de pelear por el primer título de la categoría. En ese camino, cada decisión forma parte de una estrategia mayor.

Víctor Velázquez prometió de títulos para Cruz Azul, tanto para el varonil y femenil. (YouTube Cruz Azul)
El pasado 15 de diciembre, se confirmó que jugará como local en el Estadio Centenario de Morelos, en Cuernavaca. El anuncio se realizó en un acto encabezado por Velázquez, Iván Alonso y María Fernanda Pons, junto a autoridades gubernamentales del estado. La noticia generó entusiasmo, pero también preguntas. Tras usar CU en la Liguilla, muchos daban por hecho que sería la casa del equipo para el Clausura 2026. Sin embargo, la elección final fue otra.
El Estadio Centenario, con capacidad para 14,800 espectadores y una historia ligada al futbol profesional, aparece como escenario ideal para acompañar el crecimiento del proyecto. Incluso el propio Velázquez deslizó que la estadía podría extenderse “por muchos años”, reforzando la idea de una apuesta a largo plazo.
¿Por qué no CU? La razón que habría detrás
La respuesta comenzó a tomar forma a partir de la información revelada por Fabrizio Domínguez Castillo, de Somos FOX. Según explicó, la razón principal no sería deportiva ni institucional, sino logística y reglamentaria. El avance a semifinales activó una exigencia clara del reglamento de la Liga MX Femenil: a partir de la Liguilla, los partidos deben disputarse sí o sí en un estadio.
En ese contexto, se evaluaron opciones y “ya optaron por darle semana a semana la posibilidad de jugar en un estadio como lo es el Centenario de Morelos”. CU, alternativa durante la Liguilla, quedó rápidamente descartado por una razón clave: el calendario. “Ya no daba para que la Femenil pudiera jugar”, expresó.
Allí, Domínguez explicó que, a día de hoy, en el Estadio Olímpico Universitario conviven Pumas varonil y femenil, además del equipo que conduce Nicolás Larcamón. Es por eso que si se sumaba el equipo femenil, las cuatro instituciones compartiendo sede hacían inviable sostener una localía semanal.





