Si bien parecía inquiebrantable la relación laboral que tenían el ex técnico de Cruz Azul, Pedro Caixinha, con el presidente Billy Álvarez, algo cambió este fin de semana que finalmente provocó la salida definitiva del portugués.
El mal desempeño del equipo en el empate como local ante las Chivas de Guadalajara, provocó que horas después del juego se reunieran en La Noria los dos antes mencionados junto con el director deportivo Ricardo Peláez, tal como contó el periodista de W Deportes, Carlos Córdova.
En esta cita, Billy le reprochó a Caixinha la forma de jugar de su equipo, enrostrándole la millonaria suma de dinero que ha gastado en refuerzos, en especial por el argentino Guillermo Pol Fernández, y que por la calidad de los jugadores, debiera pregonar un futbol más vertical y directo, contrario a la defensiva manera que lo hacía el lusitano.
Esto no le gustó al estratega, quien puso su cargo a disposición de la directiva, quienes finalmente terminaron por tomar la decisión de cesarlo, pese a que oficialmente el club diga que fue de mutuo acuerdo, según indicó El Universal.