No solo la Cooperativa La Cruz Azul se preocupa de fabricar cemento, ni únicamente el club deportivo Cruz Azul está enfocado en el futbol. La responsabilidad social para con las comunidades mexicanas en quienes influyen las plantas de la cementera es un pilar fundamental en el trabajo diario de la Máquina en todas sus facetas.

Intentando impulsar la actividad física y fomentar la responsabilidad social y cultural, siete poblaciones de Hidalgo y 28 comunidades de Oaxaca reciben un servicio privado de recolección de basura, generado por Cruz Azul, que recolecta más de 5700 toneladas anuales de desechos.

 

Según explicó Federico Sarabia, uno de los directivos de la Cooperativa La Cruz Azul, "fomentamos acciones sociales para mejorar la calidad de vida de sectores vulnerables de las comunidades de influencia de La Cruz Azul como la entrega de despensas y contribuciones económicas que ayuden a solventar algunas de las necesidades más apremiantes de la comunidad".

Además, la Cooperativa ha otorgado despensas a comunidades necesitadas en Hidalgo y Lagunas, Oaxaca; también en el Istmo de Tehuantepec, la cementera ha apoyado con gastos de iglesias, funerarios, manutención, educativos, actividades en pro del medio ambiente, cuidado de la salud y mantenimiento, entre otros.

Germán Díaz, Gerente General del club deportivo, destacó que "deseamos seguir sirviendo a nuestros compañeros cooperativistas y a las comunidades que nos rodean y así lo haremos hasta donde nuestros recursos lo permitan antes de que colapse nuestro sistema".