Después de deslumbrar en la final de la Copa Libertadores 2001 con Cruz Azul, Juan Francisco Palencia dejó a la Máquina y se convirtió en fichaje del Espanyol en La Liga. Un año más tarde, el Gatillero regresó al club y aunque su segunda parte no fue tan exitosa y salió por la puerta de atrás, todo fue parte del plan que hizo con Billy Álvarez por amor al equipo.
En ese lejano 2001, la familia Álvarez le ofreció un gran aumento de sueldo a Palencia, pero en vez de sentirse mercenario con el club, decidió ir a cumplir el sueño europeo por un tiempo a pesar de ganar menos dinero, no sin prometer antes que regresaría a Cruz Azul.
"No es sacrificio, yo creo que son decisiones. Yo estoy agradecido con el señor Álvarez, con Mónica Álvarez y toda la familia Álvarez porque me dijeron: '¿qué quieres hacer?'. Es la primera vez que lo cuento: me dieron esa oportunidad, hablé con Billy, con Mónica y me preguntaron qué quería hacer. Yo dije que me quería ir a Europa, entonces tenía la opción de decidir entre el Alavés y Espanyol", comenzó a explicar en plática con ESPN.
Ante eso, Palencia explicó que todo salió tal cual acordaron con el presidente celeste. "'Yo me voy a Europa, quiero experimentar eso, le prometo que cuando regrese, el primer club será Cruz Azul'. Y así fue, volví a México con Cruz Azul", añadió.
El Conejo Pérez explicó que él también hubiera preferido irse a Europa que ganar más dinero. "Para mí era una ilusión poder ir a jugar allá. Si hoy es poca la difusión imagínate antes que no había redes sociales. Antes era mas complicado encontrar una oportunidad. Por mi forma de ser, yo sí hubiera sacrificado", detalló.
