Corría el minuto 52' de partido cuando Juan Reynoso explotó. Tras salir el balón por la banda, el entrenador peruano veía desolado como su equipo no podía reponer el juego al instante ante la falta de pelotas en las inmediaciones de las acciones, por lo que se dispuso por su propia cuenta en acercarle el esférico a uno de sus dirigidos.
Tras reponerse el partido, Reynoso volteó aireado y le espetó a uno de los recogepelotas del encuentro: "¿Por qué se tardan tanto?", acompañando la pregunta con ademanes que señalaban a los jóvenes encargados mayor velocidad a la hora de hacer su labor. A pesar de que las cámaras hicieron caso omiso al incidente, el semblante del técnico no varió por el resto del juego.
Y es que Reynoso fue testigo VIP de la inoperancia de su equipo, que se vio incapaz de derribar el castillo de naipes que presentó el modesto Arahaie FC, que no salía de su asombro ante la incompetencia de sus rivales en la noche cálida de Santo Domingo en el Olímpico Félix Sánchez. La desesperación del estratega peruano dejó en evidencia el mal juego de Cruz Azul en una presentación que dejó muchas interrogantes al aire.
A pesar de que el también exjugador quiso quitar hierro al asunto en la rueda de prensa posterior al empate, lo cierto es que sus dirigidos quedaron a deber ante un equipo semiprofesional que salió al césped con la única intención de evitar la goleada en lo que se avizoraba como una derrota segura.
"Descansar recuperarnos y tenemos que felicitar que seguimos muy vivos en la eliminatoria.", fueron una de las declaraciones del técnico en la rueda de prensa, que fueron tomadas con cierta sorna por parte de la afición y prensa ante lo que también consideran una derrota simbólica para los protagonistas de una noche fría y poco vistosa... y eso que jugaron en el Caribe.
