Una de las informaciones que más fuerza fue tomando durante la semana tenía relación con Luis Romo. El talentoso volante de Cruz Azul termina contrato a fines de 2022 y, en caso de que no acepte renovar, la intención es venderlo antes de tiempo para recuperar algo de dinero y no repetir la situación que vivieron con Orbelín Pineda.

Entonces, la Máquina habría llamado a Duilio Davino, director deportivo de los Rayados de Monterrey, y les ofreció el fichaje de Romo. ¿Las condiciones? El pago de 5 millones de dólares, o un intercambio por Carlos Rodríguez o Erick Aguirre de manera definitiva. Lo único que buscaban los cementeros era seleccionado x seleccionado.

Sin embargo, Luis Romo se negó. Aunque ambas instituciones puedan llegar a acuerdo por el traspaso definitivo, el problema radica en que el mediocampista no quiere firmar. ¿El motivo? Hoy no está dispuesto a jugar en otro club de México que no fuera Cruz Azul, por lo que su destino está definido: Europa o nada.

La renovación del jugador con la Máquina volvió a entramparse, debido a que su relación con la directiva está a muy maltraer, por lo que todo apunta a que el 7 celeste no firmará la extensión de contrato. Y si tiene que hacer la Orbe 2.0 la va a hacer, porque su única meta es jugar en el Viejo Continente y está dispuesto a todo por lograrlo.

"Voy a hacer todo lo posible por ir a Europa, todo lo que esté en mis manos. Y sea lo que sea que implique, lo voy a hacer, porque es mi sueño. Si yo renuncio a mi sueño, me estaría traicionando a mí mismo", señaló Romo en plática con TUDN. ¿Será que su salida de Cruz Azul se fraguará antes de lo estipulado?