Jesús Corona
La Máquina ha llegado a su penúltimo destino: la final de ida. Cruz Azul sigue en camino hacia el ansiado noveno título. El equipo ya piensa en Monterrey y espera con ansias el par de cotejos contra el equipo de la Sultana del Norte. La Máquina está dispuesta a de una vez por todas poner punto final a la sequía de títulos en la institución cementera.
Este sábado en cancha celeste, el profesor Enrique Meza ha dado cátedra de estrategia, el Estadio Azul ha sido un testigo más de un Cruz Azul lleno de garra y espíritu. Los once guerreros celestes motivados por familiares y amigos, pero principalmente por sus propios hijos, saltaron a la cancha en busca de un resultado favorable que a la postre diera el pase a la final de la liga mexicana. Emotivo sin lugar a dudas lo que vivió la afición cementera principalmente en el segundo tiempo, ya que en el primero había sido bastante cerrado, con muy pocas ocasiones de gol, y en su mayoría, del equipo michoacano. Aún así el sabor a liguilla se sentía en cada rincón del Azul, la gente siempre entregada al equipo, jamás dejo de apoyar. Partido lleno de roces, ambas escuadras tuvieron escasas opciones de gol. Por ahí el arbitraje volvió a jugar un papel fundamental, cuando a los 17 minutos del primer tiempo, el defensa mexicano Joel Huiqui detuvo una oportunidad manifiesta de gol utilizando la mano derecha, quitándole así una oportunidad inmejorable al equipo moreliano, que dicho sea de paso, una vez más se vio carente de creatividad y talento para definir las pocas llegadas de la famosa “Monarquía”, además la figura de Jesús Corona siempre estuvo ahí para dar seguridad al cuadro bajo cementero. Se llegó la hora de corregir el barco, cuando el “Ojitos” Meza se decidió por darle juego a Javier Orozco, un jugador de cantera que además de ser un delantero más, se ha ido acostumbrando a “salvarle la vida” al técnico, todo esto, recordando los partidos de la Concachampios y algunos partidos de liga como contra Pachuca, siendo en estos cuando el ariete mexicano ha entrado de cambio a resolver el panorama que se le había complicado al cuadro cementero. Cruz Azul ha ganado el juegocon base enpaciencia e inteligencia, el cuadro cementero se notaba un tanto defensivo, no sé si por estrategia propiao por el mismo empuje monarca, la media cancha se volvía determinante para ambos equipos, pues era el equilibrio y el punto de partida para ofender al equipo rival. Corría el minuto 4 de la segunda mitad cuando Miguel Sabah lograba enviar la pelota a las redes, la afición cementera, un poco incrédula, se llevaba las manos hacia el rostro en señal de desesperación, sin embargo lo mejor estaba por venir. Un centro como con la mano y un remate del “Chuletita” hicieron que reventara el Azul, se igualaba el tanteador y la gente veía muy cerca el pase a la final. Un gol más del delantero argentino Emanuel Villa, había puesto los cartones definitivos, con un júbilo impresionante, el goleador de la liga gritaba su gol 18 con la casaca celeste y al mismo tiempo daba señales de vida. Señores… ¡El goleador de la liga ha despertado! Todo listo para que el próximo jueves a las 21.00 hrs. Se dé el primer choque de la final, Monterrey será el rival y parece que el equipo deberá pensar de manera objetiva en obtener el título, seguir con la inteligencia, el temple y la valentía para lograr un marcador favorable. Para mí, serán claves los primeros minutos en la cancha del Tecnológico, el equipo deberá salir concentrado desde el pitido inicial y estar muy atentoen todas las líneas, pues será de suma importancia el no cometer errores que puedan pesar después. Confiamos en un resultado positivo que permita cerrar la obra el próximo domingo en el Azul. ¡¡¡Vamos Cruz Azul!!! Omar Gómez Herrera, aficionado de la Máquina y colaborador de VamosCruzAzul.com Foto: Mexsport