El mercado de fichajes suele vender ilusiones, promesas y nombres rutilantes. En Cruz Azul, sin embargo, cada movimiento también arrastra historia, memoria y desconfianza. En La Noria saben que no se trata solo de reforzar al equipo, sino de hacerlo bien, con orden y coherencia.
Según la información revelada por Vamos Azul, Cruz Azul llegó a un acuerdo total con Miguel Borja, delantero colombiano con amplio recorrido internacional, y ya tendría definida incluso su fecha de llegada a la Ciudad de México. El atacante arribaría entre el 26 y 28 de diciembre para firmar su contrato y sumarse a la pretemporada.
Pero detrás del impacto inicial, comenzaron a aparecer las preguntas incómodas. Porque el acuerdo no solo implica un refuerzo de jerarquía, sino también una serie de consecuencias deportivas, reglamentarias e institucionales que hoy preocupan más que entusiasman.
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Los problemas que acarrearía la llegada de Miguel Borja a Cruz Azul
El principal problema no estaría en el rendimiento potencial de Borja, sino en el reglamento. Con su llegada, Cruz Azul queda excedido en plazas de futbolistas no formados en México, superando -de momento- el límite permitido por la Liga MX. Hace apenas meses, uno de los argumentos centrales para no incorporar un delantero como Luka Jovic fue precisamente la falta de cupos de extranjero.
La directiva celeste no ha logrado, hasta ahora, liberar ninguna de esas plazas. Y eso obliga a tomar decisiones desde la urgencia: negociar salidas con el mercado en contra, aceptar condiciones desfavorables o desprenderse de futbolistas sin una planificación clara.
El daño colateral hacia el gran anhelo de Cruz Azul
El impacto no se limitaría a lo reglamentario. Agustín Palavecino, uno de los objetivos prioritarios de Cruz Azul en este mercado, queda directamente afectado por la llegada de Borja. Su fichaje exige una plaza adicional de extranjero, algo que hoy luce prácticamente inviable.
La llegada de Miguel Borja podría impactar en el deseo de fichar a Agustín Palavecino (Imago7)
El mediocampista de Necaxa representa un perfil que el equipo necesita: dinámica, lectura de juego y capacidad para marcar diferencias en el mediocampo. Sin embargo, su incorporación quedaría en pausa, atrapada en una ecuación administrativa que complica cualquier avance.
¿Quién toma las decisiones en Cruz Azul? La sombra del pasado acecha
A esto se suma un ruido institucional que genera inquietud. En los últimos días, se filtró un audio de Gilberto Palafox, asesor cercano a Víctor Velázquez, donde se menciona una reunión con el presidente para avanzar en la llegada de Borja.
Iván Alonso no habría participado en la negociación por Miguel Borja. (Imago7)
El dato que encendió las alarmas es otro: Iván Alonso no habría participado de la negociación, según aportó también el colega Gerardo González. El director deportivo, encargado de liderar el proyecto futbolístico, quedó aparentemente al margen de una de las operaciones más importantes del mercado.
Este escenario abre interrogantes profundos. ¿Quién toma realmente las decisiones en Cruz Azul? ¿Existe un plan deportivo unificado o los movimientos responden a impulsos externos?
