Cruz Azul viajó a Qatar con la sensación de que el 2025 no da tregua. La Máquina llegó al cierre del año con un nuevo problema que encendió todas las alarmas. La más reciente lesión de Jesús Orozco Chiquete no solo sacudió al equipo en un momento crucial: reabrió un drama que el club ha arrastrado durante el último tiempo, varias bajas prolongadas que parecen golpear cuando un jugador está en un gran momento.
La escena en el Volcán fue escalofriante. Chiquete, que había ingresado en el complemento para cerrar el fondo celeste, cayó al césped después de intentar frenar un remate de Ángel Correa. Su reacción inmediata dejó claro que algo no estaba bien. Aunque las primeras versiones apuntaban a una recuperación de tres o cuatro meses, el diagnóstico final terminó por confirmar lo peor.
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De acuerdo con los reportes, sufrió un daño importante en los ligamentos del tobillo, lo que lo demandaría un proceso de recuperación que rondará los seis meses. La noticia golpeó fuerte en el entorno cementero: no solo se había ganado la confianza de Larcamón, sino que también se perfilaba como un firme candidato a meterse en la lista final de Javier Aguirre rumbo al Mundial 2026.
Las duras lesiones que ha padecido Cruz Azul en el último año
Aunque la de Chiquete es la más reciente, no es un caso aislado. Cruz Azul ha sufrido una racha dura con lesiones largas que se repiten en un patrón inquietante: siempre aparecen cuando el jugador vive un gran momento o está llamado a ocupar un rol determinante. De la portería al mediocampo y del ataque a la cantera, el grupo ha tenido que imponerse a golpes inesperados que cambiaron los planes.
Kevin Mier
La lesión del colombiano fue otra sacudida inesperada. En la fase final del Apertura 2025, Kevin Mier sufrió una fractura de la tibia derecha tras una imprudente entrada de Adalberto Carrasquilla en el duelo contra Pumas. Aunque en un inicio se habló de tres meses de baja, más adelante se reveló que el tiempo real será de cuatro a seis meses, dependiendo de su evolución.
Kevin Mier puede perderse el Mundial 2026 con Colombia por la dura entrada que recibió ante Pumas. (Imago7)
La gravedad del caso no solo pone en riesgo su participación rumbo al Mundial 2026, sino que impulsó a que Andrés Gudiño asumiera el rol de titular en un momento complejo de la temporada. Mier había sido una figura irregular en el semestre, pero volvía a encontrar un buen nivel y su ausencia descompuso una estructura defensiva que recién comenzaba a consolidarse.
Andrés Montaño
El mediocampista comenzaba a asomar como una de las apuestas más firmes del proyecto: se ganó un lugar como pieza clave para Vicente Sánchez durante el Clausura 2025 y en Liguilla había anotado goles calve ante León, hasta que una dura lesión en el partido de vuelta lo dejó fuera por muchos meses.
Andrés Montaño hizo un cambio de dirección y su pierna quedo trabada a los 8 minutos del partido ante Club León en Liguilla. (JAMMEDIA)
Hoy Andrés Montaño ya transita la última etapa de recuperación por una ruptura de ligamento cruzado anterior y meniscos de la rodilla izquierda: pisa el césped, realiza cargas progresivas y avanza hacia un regreso pautado para inicios de 2026. Aun así, su ausencia durante todo el segundo semestre fue un vacío para La Máquina.
Gabriel Fernández
El delantero uruguayo es uno de los mejores ejemplos de resiliencia en el plantel. Después de una recuperación larga por una lesión grave en 2024, el Toro había arrancado el 2025 recuperando confianza. Tanto que Vicente Sánchez lo eligió como titular en la semifinal de vuelta de la Concachampions ante Tigres, donde estaba completando una actuación sobresaliente.
La lesión del Toro Fernández en Concacaf casi le costó su puesto en Cruz Azul durante el verano. (Imago7)
Pero un choque con Fernando Gorriarán terminó en un dolor intenso en su rodilla derecha. Los estudios revelaron una distensión del ligamento colateral medial, una lesión que lo obligó a parar nuevamente y frustró su regreso en el momento más alto de su resurgimiento deportivo, al punto que Cruz Azul casi lo deja ir en el verano.
Bryan Gamboa
En septiembre, con la lesión muscular de Ángel Sepúlveda, muchos voltearon a ver a Bryan Gamboa como la alternativa natural desde la cantera. El joven delantero de 23 años había sido titular recurrente en el proceso de Joaquín Moreno y estaba listo para dar el salto. Pero una rotura de ligamento cruzado sufrida en un partido de la Sub-21 apagó de golpe esa posibilidad. La recuperación estimada era de siete meses, de los cuales ya ha superado una parte.
