El nombre de Edgard Andrade quizás no les sea familiar a los más jóvenes, pero lo cierto es que fue un gran valor para el Cruz Azul. Directamente de las fuerzas básicas, su gran nivel fue llamando la atención del entrenador de aquel entonces, quien no dudó en enviarlo al campo de juego en enero del 2006, cuando solo tenía 18 años.

Vale recordar que un año antes a su aparición en el futbol de elite, Andrade formó parte del plantel Sub-17 que se consagró campeón del mundo en Perú, bajo la conducción técnica de Jesús Ramírez. Todo era color de rosas para el joven canterano, pero de pronto aparecería en su vida una triste y constante realidad: las lesiones.

El 12 de mayo del 2007, en el juego de vuelta de los cuartos de final del Clausura 2007, Andrade sufrió una fractura de tibia y peroné, así como lesiones en los ligamentos del tobillo derecho, al intentar recuperar un balón. La lesión lo mantuvo alejado de las canchas por cinco meses y ya no volvería a ser el mismo.

Retornó a los campos de juegos, pero como decíamos nunca supo ser aquel futbolista picante y veloz que todos conocimos. Pese a tener la confianza del Cruz Azul tras darle la mítica playera ’10’, al poco tiempo terminó fuera de la institución en búsqueda de nuevos retos para su carrera.

Jaguares de Chiapas fue el equipo que lo acogió, quien luego se extinguiría por 5 años para retornar nuevamente en 2024, pero en la Liga Expansión. Volviendo a Andrade, no le fue nada mal en este lugar, dejando un registro de 116 partidos entre Liga MX, Copa MX, InterLiga y Copa Libertadores 2011, y anotando 15 goles.

Monarcas Morelia, Tiburones Rojos de Veracruz (con ambos sería campeón de Copa MX en 2013 y 2016), Pachuca y Cafetaleros de Chiapas fueron sus últimos clubes en el profesionalismo, colgando las botas de manera definitiva en el año 2020. En total, Andrade concluyó con su carrera dejando un registro de 308 partidos y 38 tantos.

Esta semana fue noticia casi sin quererlo Andrade, ya que luego de 15 temporadas otro mexicano vuelve a portar la mítica jersey con el dorsal 10: se trata de Andrés Montaño, quien a diferencia del canterano fue adquirido desde el Mazatlán por 2 millones de dólares. Con la confianza a cuestas, buscará sin dudas tener un final feliz.

¿Qué hace hoy en día Edgar Andrade?

En su cuenta personal de Instagram, el ex cementero muestra a sus 36 años que es dueño de una inmobiliaria, pero también de un negocio de venta de aguacates Hass. Si bien está lejos de los terrenos de juego, quedará en la memoria colectiva como ese crack que nunca pudo terminar de explotar.