En los últimos juegos, Cruz Azul ha mostrado una irregularidad en su rendimiento que despierta bastante intranquilidad. Sobre todo porque el equipo de Martín Anselmi se ha caracterizado en el Clausura 2024 por ejecutar un plan específico durante los 90 minutos. Sin embargo, frente a Puebla, y sobre todo contra Atlas, el movimiento colectivo de los jugadores se fue desdibujando con el desarrollo del partido.

La realidad es que ‘La Máquina’ tenía una oportunidad de oro en el último fin de semana para sellar su clasificación a la liguilla, pero solo se rescató un empate contra Atlas. Si bien es cierto que en el segundo tiempo el equipo dio la cara por su afición, la primera parte fue catastrófica. Esta será una problemática que el entrenador deberá resolver antes de los duelos de eliminación directa, ya que allí no se perdonarán esta clase de errores.

Independientemente del resultado final y del rendimiento del equipo, el duelo terminó definiéndose en una polémica arbitral. En la última jugada del partido, un defensor rojinegro le hizo una fuerte entrada a Rodrigo Huescas cuando estaba por rematar a portería. Lo insólito no solo estuvo en que Luis Enrique Santander ni siquiera la revisó en el VAR, sino que directamente finalizó el partido.

A raíz de esta situación, Tito Villa se expresó al respecto en ‘El Podcast de la Máquina’: “A fin de cuentas hay una jugada muy polémica en el final. Yo no entiendo como esa jugada, esa infracción de Idekel (Domínguez) sobre Huescas prácticamente en la última jugada no se termina sancionando como penal. Y son de las cositas que siempre nos regala el arbitraje”.

Ignacio Rivero se quejó directamente con los árbitros

En la entrevista una vez finalizado el partido, Nacho Rivero dejó en evidencia su postura sobre la jugada: “Todo el mundo lo vio. Hay dos jugadas claras contra Rodri (Huescas) que dentro del campo se ven como penal, pero más que decirles que las vayan a mirar… no podemos hacer. Si el juez y el VAR decidieron que no… así fue y ya está“.

Al mismo tiempo, aunque no hay registro de ningún tipo, distintos periodistas marcaron que Nacho Rivero fue directamente a hablar con Santander al no pitar el penal sobre el final. El capitán celeste les habría gritado al grupo arbitral: “Fue un robo… la puta que los parió… era penal”.