Llegar a Cruz Azul y vestir sus colores no es para cualquiera, y Marcelo Palau lo sabe muy bien. Entre la ilusión de un joven uruguayo y la exigencia de un club histórico, el mediocampista vivió momentos que aún recuerda con emoción. “Lo de Cruz Azul a mí me encantó. Fue uno de los equipos más grandes en los que me tocó jugar”, confiesa en exclusiva para Vamos Azul.
“Me quedó la tranquilidad de haber llegado a clubes tan importantes, de haber compartido plantel y cancha con compañeros y con rivales de una talla que seguramente eran mucho más alta que la mía“, recuerda el ex mediocampista que tuvo una extensa carrera por Paraguay, Uruguay, Brasil y México.
ver también
Duró seis meses en Cruz Azul, hoy es DT y posee dos barberías en Paraguay: “Me hubiera encantado…”
Pero más allá del terreno de juego en La Noria, Palau guarda los recuerdos de un vestuario que lo adoptó “y me hicieron saber que era uno más del plantel“. “De ese plantel me llevo recuerdos muy buenos, no solo dentro de la cancha, sino en lo que fue fuera”, expresó con nostalgia.
La inesperada familia que Marcelo Palau encontró en Cruz Azul
No obstante, de sus compañeros, no titubeó ni un instante al destacar a uno de ellos por los grandes gestos que mostró con él, Christian Giménez: “Tuvimos la fortuna de conocer a Chaco. Ya sabes el tipo de persona que era y sigue siendo“. “Viví el día a día con el Chaco Giménez de una profunda manera especial“, recuerda.
Al llegar a México, Palau se encontró en una ciudad desconocida y solamente con su esposa. Y fue el argentino quien se convirtió en su guía y apoyo: “con su familia nos arroparon de una manera espectacular“. “Me sirvió para tomarlo como ejemplo, para cuando a mí me tocara cumplir ese rol, de tener que recibir a alguien”, añade.
Marcelo Palau destaca la relación que generó con el Chaco Giménez mientras estuvo en Cruz Azul. (JAMMEDIA)
¿Cómo fue la relación de Marcelo Palau y Christian Giménez?
“Me pasaba a buscar para ir a entrenar, conocer la ciudad y para ir a ver el lugar donde iba a vivir. Se venía de su casa, que no estábamos tan cerca, para que yo aprontara el mate y nos íbamos tomando mate al entrenamiento”, recuerda Palau.
Allí recuerda también a Emanuel Villa y señala que, al lado del Chaco y de Tito, construyó un espacio de camaradería y respeto que trascendía lo futbolístico. Además, menciona a otros sudamericanos que hicieron más llevadera su experiencia: Waldo Ponce, Isaac Romo y sus respectivas parejas. “Armamos un lindo grupo, muy rápido. Nos hicieron sentir como si me conocieran de toda la vida. Eso a mí me ayudó un montón”, contó al respecto.
¿Cómo vivía la competencia con Gonzalo Pineda y Gerardo Torrado?
El mediocampo de Cruz Azul estaba lleno de talento en 2011, y Palau compartió con dos figuras de la Selección Mexicana como Gerardo Torrado y Gonzalo Pineda: “Para mí, era un sueño competir con ellos. Me obligaba a ser mejor jugador día a día“. “Haber sido titular por delante de ellos en algún momento, era algo impresionante. Y era lindo, una competencia sana y ellos también me lo hacían sentir así“, recordó sobre los referentes azules.
Marcelo Palau recordó como era competir por un lugar frente a Gerardo Torrado y Gonzalo Pineda. (JAMMEDIA)
“Había una gran relación. Sobre todo por parte de ellos hacia mí, porque ellos eran las reales figuras del equipo, y mexicanos, y yo quizás llegaba nuevito, casi que desconocido. Y a mí me trataron siempre como uno más“, añadió.
