Igor Lichnovsky encendió las alarmas esta tarde en Cruz Azul cuando debió salir de cambio a los 42 minutos del juego ante Querétaro tras un fuerte golpe en la rodilla que no le permitió continuar en el partido.

El defensor salió del estadio La Corregidora caminando sin muletas, pero con una pequeña cojera que no le permitía hacerlo 100% bien. Sin embargo, aseguró no tener aún un diagnóstico médico.

Lichnovsky, además, no se detuvo a hablar con la prensa, pero señaló que se realizaría estudios esta noche para dimensionar la gravedad de su lesión. “Ahora voy a ver, me voy a hacer un examen”, explicó.