La propuesta de un Fondo de Inversión millonario para el fútbol mexicano ha puesto a Cruz Azul en una posición bastante incómoda. Según revelaron desde el diario Récord, hay cierta resistencia a someterse a una auditoría financiera, requisito indispensable para acceder a los recursos que la Federación Mexicana de Fútbol (FMF) planea distribuir entre los equipos de la Liga MX.
El periodista Alejandro Gómez sugiere que hay nerviosismo en el cementero ante esta situación. El mismo viene de la mano de Guillermo ‘Billy’ Álvarez, ex presidente de la institución y que fue acusado de diversos delitos relacionados al lavado de dinero, malversación de fondos y robo.
Pero nada es gratis: La reticencia de Cruz Azul a abrir sus libros contables podría tener consecuencias significativas. Si no se permite dicha inspección, el club corre el riesgo de quedar excluido de los beneficios del Fondo de Inversión, estimado en aproximadamente 1.300 millones de dólares, una verdadera fortuna.
Tal y como se menciona, este escenario plantea un dilema para la institución cementera: por un lado, la oportunidad de acceder a recursos frescos que podrían destinarse a refuerzos, y también al tan anhelado proyecto de un nuevo recinto para dejar la localía del Estadio Azul.
Ahora bien, Cruz Azul no es el único equipo en poner frenos a esto, ya que Rayados de Monterrey se encuentra en la misma situación. El tema pareciera llevar más tiempo retrasado a lo previsto, sin siquiera ponerse de acuerdo aún en la forma de repartir toda esa suma sustancial de dinero.
¿De qué es acusado el ex presidente de Cruz Azul, Billy Álvarez?
Desde 2020, Álvarez comenzó a ser investigado por lavado de dinero y delincuencia organizada, a raíz de que la Unidad de Inteligencia Financiera le detectara actividad irregular. La Fiscalía General de la República elevó una orden de aprehensión, pero el ex mandamás celeste se dio a la fuga, razón por la que la Interpol emitió una alerta de búsqueda hasta que la misma se suspendió.