Un solitario gol de Santiago Giménez fue suficiente para que Cruz Azul inscribiera su nombre en la final del Guardianes 2021 de la Liga MX. Los cementeros superaron al Pachuca con un global de 1-0 y se jugarán la octava estrella contra el ganador de la otra semifinal que disputan Santos y Puebla.

La clasificación de los celestes a la última instancia estuvo empañada por los últimos minutos disputados en el Estadio Azteca ante los tuzos. Al minuto 93′ del encuentro, Jonathan Rodríguez tuvo un forecejeo con Gustavo Cabral que terminó con el Cabecita por los suelos. Tras el salir el balón del rectángulo de juego, el uruguayo pidió desde el césped una falta al juez central que tan solo decretó saque de banda para la visita.

En este interín, Cabral ¿con intención? pisó la pierna de Roríguez mientras buscaban el balón que ahora estaba en posesión de Juan Reynoso. El jugador rival, esta vez sí con claras intenciones de hacer daño, empujó al director técnico de La Máquina y ahí daba inicio a una pelea descomunal.

Cabral pisa a Jonathan Rodríguez (Imago 7)

Santi Giménez fue el primero en salir desde la zona de banquillos para defender a su entrenador. Reynoso a su vez, intentaba calmar los ánimos haciendo de pared entre el Chaquito y Cabral. A los alrededores se empezó a formar un conato de bronca que terminó con el colombiano Felipe Pardo empujando y golpeando a integrantes del cuerpo técnico local.

Walter Montoya intentó separar los bandos (Imago 7)

Jaime Serna, asistente técnico de Cruz Azul, salió expulsado después de que intentara una patada hacia la humanidad de Pardo, que seguía desbocado ante la insistencia de un Walter Montoya que intentaba controlarlo. Minutos después de que se calmaran los ánimos, el VAR llamó al juez central y este revisó la jugada desde el inicio y procedió a expulsar a Cabral en lo que fue el cierre de un duelo disputado y muy luchado que dio el pase a los cementeros a su séptima final desde su última corona.