Uno de los árbitros más polémicos de toda la Liga MX es Marco Antonio Ortíz, quien se destaca por su arrogancia dentro del campo de juego. A pesar de que tomó una decisión más que controversial en la última final entre Cruz Azul y América, la Comisión de Árbitros lo eligió como el mejor juez de la última temporada. Por supuesto, la afición cementera se sintió insultada debido a que el Gato le impidió quedarse con la Décima.
El problema que hay con Ortíz no se encuentra en las decisiones arbitrales que toma en el desarrollo de los partidos, sino en la actitud que suele tomar. En el caso de la final en donde pitó penal de Rodolfo Rotondi a Israel Reyes, el VAR lo llamó para revisar su decisión. Aunque en ningún momento se ve una falta clara del jugador argentino, el silbante determinó mantener el penal. En los audios divulgados por la propia comisión se pudo escuchar como sus colegas no estaban de acuerdo con el árbitro central.
Lo cierto es que el Gato Ortíz terminó de quedar expuesto en el juego entre Pachuca y Mazatlán por la jornada 5 del Apertura 2024, en donde expulsó a dos tuzos. Si bien la roja a Salomón Rondon es debatible, la de Gustavo Cabral se originó a partir de una discusión con el propio silbante. Mientras que el futbolista se mostró furioso por el arbitraje, Marco Antonio tampoco mantuvo la compostura.
A raíz de dicho partido, la Comisión de Árbitros decidió darle tres partidos de suspensión a Ortíz, por lo que recién volvería en la jornada 9. Lo particular es que TUDN informó que le recomendaron y pidieron al Gato que asista al psicólogo para que solucione sus problemas de actitud dentro de la cancha. En el deporte moderno es muy usual la presencia de expertos en psicología para ayudar a los protagonistas a lidiar con la presión a la que están sometidos.
Cruz Azul no ha sufrido injusticias en el Apertura 2024
Luego de la gran polémica en la final contra América, Cruz Azul no ha tenido demasiados inconvenientes en el comienzo de la nueva temporada. Es evidente que siempre existen polémicas a lo largo del desarrollo de un partido, pero no ha sucedido nada que cambie un resultado final. Quizás lo más grave fue la patada en la cabeza que recibió Ignacio Rivero en la tercera jornada contra Tijuana.
En aquel duelo, Nacho entró solo en el área rival para cabecear un balón que había quedado sin dueño, pero Joe Corona fue con la pierna muy levantada y terminó impactando en la cabeza del uruguayo. Aunque Ismael López Peñuelas la fue a revisar en el VAR, señaló que fue un golpe lícito de una acción de juego. Lo cierto es que la falta fue tan criminal que Rivero recibió puntadas en la cabeza y tuvo que ser sustituido en el entretiempo.