Joaquín Beltrán llegó a Cruz Azul en 2007 desde Necaxa y por pedido expreso de Sergio Markarián y Eduardo de la Torre. Su misión, según cuenta, era fortalecer y guiar a los jóvenes de la defensa de La Máquina. Pero, en sus dos años con el equipo cementero, se consolidó como pieza clave, ganándose el respeto de compañeros y afición.
Al principio, los seguidores cementeros mostró cierta resistencia por su paso en Pumas, pero su entrega y profesionalismo pronto lo convirtieron en uno de los referentes. Participó en cuatro torneos con Cruz Azul, desde el Apertura 2007 hasta el Clausura 2009, y su presencia fue fundamental en el esquema de Markarián y posteriormente de Benjamín Galindo para alcanzar dos finales.
El Capi vivió de cerca los dos momentos más intensos de esa etapa: la final del Clausura 2008 contra Santos y la del Apertura 2008 frente a Toluca. En la primera, Cruz Azul peleó hasta el último minuto en Torreón, donde un gol de Ludueña definió la serie. Con la siguiente, en el Nemesio Diez, la historia se repitió con un primer partido desfavorable en casa.
La revancha en Toluca tuvo de todos los condimentos: La Máquina remontó los goles de desventaja y llevó el encuentro a tiempo extra y penales. Sin embargo, la lesión de César Villaluz y las polémicas decisiones arbitrales complicaron aún más la misión. La serie se definió 7-6 a favor de Toluca en los penales, dejando un dolor profundo en el vestidor cementero.
El recuerdo de Joaquín Beltrán sobre las finales perdidas con Cruz Azul
“Recuerdo las dos finales muy parejas”, dijo Beltrán sobre aquellos encuentros. Luego añadió: “Me parece que si hay algo que nos pesó para no poder levantar el título fue que en ninguna logramos sacar ventaja en el Estadio Azul. En los dos partidos, en las dos series, nos fuimos con desventaja a la vuelta”.
Respecto a la definición ante Toluca, señaló: “La segunda la jugamos de manera más seria, más maduros. Ya sabíamos lo que íbamos a jugar y, bueno, otra vez nos fuimos con desventaja del Estadio Azul y hacemos un gran partido en Toluca, que desafortunadamente se ve complicado por la jugada de Villaluz, de un claro penal“.
“Lo difícil para nosotros fue que no se marcó el penal, no hubo expulsión para el rival y nosotros nos quedamos con 10 hombres, porque ya habíamos hecho los tres cambios. Jugamos con 10 hombres casi 45 minutos, más el tiempo extra, y la serie de penales desafortunadamente no se inclinó a nuestro favor”, añadió sobre las dificultades que implicaron aquella recordada jugada con César Villaluz y José Crusalta.
¿Cuál de las dos derrotas dolió más? ¿Ante Santos o Toluca?
“La segunda (Apertura) nos dolió en el alma porque creo que habíamos hecho un esfuerzo grande para ganar el título”, confesó el ex defensa. Luego añadió que “hoy te puedo decir que son grandes recuerdos por todo lo vivido como equipo, pero sí quedó la espinita de que no pudimos levantar el trofeo”.
Beltrán también habló sobre cómo se vivió el vestidor tras esas derrotas: “Después del partido de Torreón, fue doloroso igual. En el vestidor estábamos muy tristes, pero animados en el sentido de que nos apoyamos y dijimos: ‘Hoy no fue, vamos a prepararnos y va a ser la que sigue, vamos a entrenar fuerte’. Pero La de La Bombonera fue muy difícil reponerse. Entramos mudos, dolidos, angustiados… algunos lloramos“.
“Creo que de ese torneo al siguiente, más allá de que llegamos a la final de la Liga de Campeones de CONCACAF, no nos levantamos. O sea, nos costó muchísimo, ni siquiera llegamos a la Liguilla, inclusive creo que en algún momento fuimos hasta último lugar de la tabla general”, añadió.