“Tenemos 5 opciones de calendarios trabajados, desde calendario apretado con jornadas dobles, hasta el otro extremo”. Esto dijo el Presidente de la Liga MX Enrique Bonilla en declaraciones recientes sobre las posibles soluciones a una vuelta del Clausura 2020 de la Liga MX. Realistas o no, la realidad es que todo apunta a que Cruz Azul será marginado en caso de suspensión total del torneo, y en caso contrario, necesitaría de todos sus elementos para afrontar un calendario que se antoja muy estrecho.
A pesar de lo enfático de sus palabras, Bonillano estableció fechas para este calendario, sin embargo, asomó la posibilidad de que se jueguen fechas dobles entre semana y a puertas cerradas. Todo esto con la intención de que el Clausura 2020 culmine el faltante de jornadas y la posterior Liguilla entre los mejores ocho.
La idea principal del presidente de la Liga es no interferir con el calendario del Apertura 2020, por lo que las soluciones para el torneo en cuestión deben apresurarse para no entrar en disputa con el siguiente campeonato. Con el pedido de confinamiento estricto por parte de las autoridades sanitarias, una vuelta a los entrenamientos ahora mismo pareciera una quimera, pero siguiendo la lógica de Bonilla, son muchos los días que necesitarían los equipos para aclimatar -de nueva cuenta- a sus plantillas.
Yoshimar Yotún sería un elemento que se sumaría tras sufrir una recaída de su lesión
¿Y Cruz Azul? El caso de La Máquina es paradójico. El equipo cementero sería uno de los más afectados ante un “vendaval” de partidos: líderes en la Liga en solitario, el primer puesto se vería amenazado ante una inminente fatigada que afectaría de lleno a una plantilla en la que elementos importantes, como Milton Caraglio y Yoshimar Yotún, vendrían de una “recuperación hogareña” con mucho trabajo por hacer antes de entrar en una dinámica con el resto de la plantilla.
Además, el entrenador del equipo, Robert Dante Siboldi, no ha utilizado en demasía a sus elementos más jóvenes, por lo que un aluvión de partidos lo obligaría a disponer de jugadores que, de manera evidente, aún no gozan de su total confianza. Todo esto se suma a lo que pueda devenir en la Concachampions, donde Cruz Azul está instalado en los cuartos de final y tiene pendiente sus encuentros ante el LAFC, por lo que estos partidos también buscarían acomodo dentro de un calendario por más de apretado.
Al final, La Máquina, claramente está resultando la más afectada por el parón de los torneos que pararon en seco el buen andar con que venía. Ahora, y a espera de las resoluciones, empezaría una nueva temporada en donde se pondrá a prueba, más que el acomodo y nivel de los equipos, la profundidad de sus plantillas.