La participación de Cruz Azul en el torneo Guard1anes 2021 de Liga MX comenzó con el pie izquierdo. Dos derrotas en los primeros dos partidos, sumados a Juan Reynoso (un DT que no gustaba a la afición), justo después de la dura eliminación en el campeonato anterior y de la derrota en el primer partido de la Liga de Campeones de Concacaf.

Y a los aficionados no les gustó, ya que después de los rumores de que el plantel de la Máquina había amañado las semifinales ante Pumas, quedaron muy dolidos con el equipo y convencidos de que eran “vendidos”, a pesar que el plantel lo desmintió todo y el periodista no entregó pruebas para certificarlo.

Por esa razón, durante las primeras fechas, Cruz Azul debió ver protestas de aficionados en el hotel de concentración y en la entrada del estadio Azteca antes de los partidos, que fueron disminuyendo a medida que el equipo comenzó a ganar. “Mucho sueldo, poco hu3v0” fue uno de los letreros que llevaron los fanáticos.

Y por esa razón, hubo cambios en las rutas que sigue el plantel celeste entre el hotel y el estadio, para evitar ser encarados nuevamente por la afición y blindar al equipo. En el Royal Pedregal, el camión cementero no se estaciona en la puerta principal sino que en el estacionamiento trasero, con cercas que alejan a las personas que no están dentro del hotel.

En el Coloso de Santa Úrsula, por otro lado, Cruz Azul ya no ingresa por la puerta 3 como siempre, sino que lo hace por la puerta 1, para evitar cruzarse con los aficionados y sus mantas y gritos en contra del plantel.