En el futbol mexicano y Mundial, siempre se conocen historias en las que han llegado jugadores para reforzar a las instituciones deportivas, pero que no lograron convencer a la afición, por lo que su estadía en el club fueron pasajeras.
Y es que desde el último campeonato que logró Cruz Azul, pasaron deportistas que no lograron conseguir un buen presente en La Máquina Cementera.
Uno de los más reciente es el de Stephen Eustáquio, donde el futbolista portugués llegó para el Clausura 2019, y en su primer partido se lesionó, quedando fuera de los partidos por los próximos siete meses. Posteriormente, solo sumó minutos en la Sub 20 del club.
Otro de los jugadores más recordados es el caso de Carlos Lizarazo, quien llegó en el año 2015 al club y venía con una lesión. Se fue del equipo sin sumar minutos en la Liga MX.
Seguramente, también recordarán lo ocurrido con Roque Santa Cruz. El paraguayo llegaba con el cartel de jugador Mundial, pero que sufrió con las constantes lesiones en su estadía en el equipo.
Uno que tampoco podría faltar en la lista es el del defensor chileno Waldo Ponce. El andino fue mundialista en Sudáfrica 2010, llegando al equipo con una experiencia deportiva en el continente Europeo, pero como fue en gran parte de las situaciones, las lesiones fueron un tema en el jugador, incluso hasta seguir con su carrera futbolística.
