Dicen que a la tercera va la vencida, pero esta máxima en algunos no logra concretarse. Es el caso de Cristian Riveros, el exjugador de Cruz Azul que estuvo presente hasta en tres finales y en ninguna pudo coronarse. Recordado como uno de los mejores extranjeros que ha formado parte del equipo en lo que va de siglo, el mediocampista paraguayo sigue en activo jugando en su país, con el Nacional.

Lloré las tres veces… pero más que todo por la gente, que siempre estuvo allí y siempre nos apoyó. También por la directiva de ese momento, que hizo todo lo posible para que nunca nos faltara nada. Hay jugador que apenas llegan y ganan títulos, desafortunadamente ese no fue mi caso, pero hay que levantarse y seguir, dijo Riveros en una entrevista con Fox Sports.

Riveros en el Mundial de Sudáfrica 2010 (Getty Images)

Riveros en el Mundial de Sudáfrica 2010 (Getty Images)

El guaraní es recordado con mucho cariño por parte de la afición cementera. Llegó en el año 2007 a La Noria de la mano de Sergio Marakarian, quien le dio un ‘lavado de cara’ al equipo y lo llevó a instancias finales en más de una ocasión. Aquel conjunto es uno de los más anhelados por los fanáticos celestes por la brillantez y estética de juego que desplegó sobre el campo.

Clausura 2008 ante el Santos, Apertura 2008 ante el Toluca, y el Apertura 2009 ante el Monterrey, fueron las tres finales en las que Rivero estuvo a un paso de la gloria. En sus tres años en el equipo (2007/10), disputó 135 partidos y convirtió hasta en 22 ocasiones. En toda su estela, estuvo sobre el terreno defendiendo la playera cementera por 11,480 minutos de juego.

De La Noria cruzó el océano para instalarse en la Premier League en las filas del Sunderland. Tras un paso breve por el fútbol de Europa, regresó a Suramérica y puso rumbo a Brasil, en donde jugó con el Gremio. De allí se repatrió a Paraguay y formó parte del Olimpia y Libertad; hoy, con 37 años, sigue despuntando en el medio de la cancha del Libertad, y su recuerdo ¿grato? con Cruz Azul sigue vivo en el ideario, pero como el mismo afirmó hace meses: “hay que levantarse. No hay de otra”… para algunos esto no sería fácil, pero vaya que el si lo hizo..