Cruz Azul se coronó campeón de la Supercopa, luego de vencer en la tanda de penales al Bicampeón Atlas y es que pese a que no han llegado los refuerzos a La Máquina, el estratega Diego Aguirre pudo sacar el barco a flote con los elementos disponibles.
El charrúa llegó al cuadro de La Noria hace casi un mes y aunque se pensaba que con su llegada los refuerzos haría lo mismo siguen pasando los días y no hay noticias, tanto que ya hasta se coronó por primera vez en el futbol mexicano y aún no se cierran filas a unos días del arranque del Torneo Apertura 2022.
Si de algo puede estar tranquila la afición cementera es que Aguirre poco a poco le ha dado otra cara al cuadro titular, dejando ver el orden y el buen trato con la pelota. A sus 56 años ya puede presumir de haber ganado una copa con La Máquina aún si iniciar el torneo regular y ver su debut.
Mesurado en los festejos, Aguirre no pasó por alto la desgracia de Quiñones quien voló el esférico de frente al arco de Sebastián Jurado, dándole el título a Cruz Azul con un marcador de 2-2 (3-4 penales).
Mientras todos los futbolistas de la banca corrían a celebrar al arco de Jurado y con sus compañeros que les tocaba cobrar los penales en el centro del campo, el estratega celeste se giró hacia las gradas para alzar los dos brazos y con los puños agitarlos hacia la afición, quien no dudó en responderles el gesto.
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