Cruz Azul es noticia aun y cuando no es protagonista. El club de La Noria ha estado inmerso en hechos que no corresponden al ámbito deportivo y que han ayudado a reforzar la popularidad del equipo. Este caso corresponde a una leyenda de los más surrealista: el perro que comía de una cuchara luego de que su familia asistiera a un partido de La Máquina.
La publicación se hizo viral haces meses y relata la historia de un aficionado de Cruz Azul que contó cómo después de una derrota de los cementerosen el Estadio Azul, uno de sus primos terminó en el psiquiatra por ver a su perro comiendo cereal con una cuchara. En resumidas, la historia es así:

Luego de asistir a un partido de La Máquina en el que cayó 0-1 en el Estadio Azul, el relator de la historia, junto con su tío y sus dos primos, llegaron a casa. Con la premura de llegar al baño, los dos últimos salieron disparados del auto y se metieron al hogar; después de unos instantes, se empezaron a escuchar gritos, platos tirados al piso: alguien había enloquecido.
El relator junto con su tío, nerviosos y trastabillando, corrieron y se adentraron en la casa para comprobar el por qué de tanto griterío. Lo que vieron los dejó pasmados: uno de los chavos estaba llorando debajo de la mesa, mientras que el otro, con cara roja y despeinado, hacía ademanes y se retorcía, poseso de algún ente sobrenatural que lo consumía.
Al cabo de unos momentos, lograron meter un trapo en su boca: lo amarraron a una silla, y dejaron que el calor del momento bajara. Al rato, solo lloraba como si la angustia ahora se expresara en lágrimas. Al preguntar al otro chavito qué había sucedido, este lo dijo: “Vimos al perro comiendo de una cuchara”, apenas pronunciólas palabras, el que estaba amarrado comenzó de nuevo baile demoníaco en medio de todos.

Ya pasadas las semanas, el relator principal contó que su primo tuvo que ser ingresado al psiquiatra, y que desde entonces, asiste de manera regular para controlar su “problema”. Su tía, la madre de los chicos, no llegó a entender qué había sucedido, y el más pequeño, cansado de dar explicaciones, dibujó lo que vio y que se haría viral enseguida: un perro comiendo cereal desde una cuchara. Desde allí, la leyenda de este perro que jamás volvió a aparecer, tiene a Cruz Azul como un protagonista secundario, pero que acrecienta su leyenda en el imaginario del fútbol mexicano.