Una de las grandes noticias que recibió la afición de Cruz Azul el viernes por la mañana es que Gabriel Fernández volvió a tener minutos. Después de estar ocho meses inactivo por una lesión en su rodilla, el delantero uruguayo tuvo la oportunidad de saltar a la cancha nuevamente. Con el objetivo de que recupere ritmo de competencia, el cuerpo técnico decidió que juegue con la Sub-23 frente a Puebla.
La realidad es que el Toro marcó un gol contra La Franja y fue clave para que La Máquina se llevara la victoria por 3 a 1; resultado que lo sigue poniendo arriba en la tabla de posiciones. Si bien es cierto que fue reemplazado a los 60 minutos, esto se hizo para no exigirlo de más. Sobre todo considerando que el miércoles hay un compromiso ante Juárez y la idea es que vuelva a estar presente en el campo de juego. Todavía no se decidió si tendrá minutos en el primer equipo, o si repetirá en las fuerzas básicas.
Después del triunfo de Cruz Azul en el Estadio Cuauhtémoc, Martín Anselmi hizo referencia al regreso del uruguayo: “Estamos súper felices. Creo que hoy se dio una mañana redonda; pudo completar 60 minutos, pudo convertir un gol y se lo vio bien. Teníamos nuestras dudas con que participe o no según cómo iba a estar el campo de juego”.
“Se levantó bien temprano, viajó hasta el escenario en donde se disputaba el partido de la Sub-23, evaluó el campo de juego y decidió competir. La verdad es que terminamos redondeando una mañana espectacular”, expresó el entrenador argentino. Por supuesto, hay una expectativa muy grandes de ver cómo encaja Fernández en el nuevo sistema que se implementó en el equipo.
El rol que Martín Anselmi le daría al Toro Fernández en Cruz Azul
Más allá de que el cuadro cementero está jugando con un único delantero centro, Luis Romo ha acompañado bastante a Giorgos Giakoumakis en esa delantera. A pesar de que con el balón se retrasa para realizar relevos, a la hora de presionar se encuentra casi en la misma línea que el griego. Por lo tanto, se especula con que el Toro podría tener exactamente ese rol pero con una vocación ofensiva mayor.
Está claro que el atacante de 30 años necesitará algunos partidos para volver a encontrarse con su mejor versión; el plan es que pueda recuperarla de cara a la liguilla. Aún así, será interesante ver cómo se complementarán Giakoumakis y el Toro en la delantera cementera, por características deberían ser socios perfectos. Lo curioso es que, en la Sub-23, Fernández fue la referencia de área de su equipo.