Prácticamente toda la atención del futbol mexicano está puesta constantemente en lo que sucede con los grandes equipos de la Liga MX. Es por eso que se abolió por completo el sistema de ascensos y descensos, ya que trae más drama que tranquilidad a los clubes. Y aunque esto termine perjudicando a la Selección Mexicana, es una decisión que tomaron los propios dueños de las instituciones con sus votaciones.
Es por eso que historias como las de Sergio Bueno suelen tener un impacto muy importante en los verdaderos aficionados del futbol mexicano. En 2015 tuvo la oportunidad de ser el entrenador de Cruz Azul, a pesar de que solamente duró unos meses. Fueron un total de 16 partidos los que disputó con La Máquina entre el torneo local y la Copa MX; las 8 derrotas en esos encuentros fue lo que le costó el puesto.
Aún así, el ex técnico del cuadro cementero hoy está luchando por mantener a flote el club que fundó en su ciudad natal: Colima FC. Este deseo de Sergio Bueno surgió a partir de que en 2019 desapareció Loros de Colima, por lo que se esforzó para crear un equipo que juegue la Liga Premier; con el objetivo de representar sus inicios.
Los Caimanes de Colima nacieron en julio del 2020 y Bueno ocupó el puesto de presidente para hacer crecer la institución. No obstante, en febrero del 2024 decidió convertirse en el director técnico del equipo y le dejó la administración a su hija. Esta decisión se tomó para que el club gane más seriedad y así puedan seguir sosteniendo un proyecto que es muy importante para toda su familia.
“El proyecto ya no es personal, es familiar porque están metidos mis hijos y mi mujer, mi hijo juega y mi hija está como administradora del club, yo antes estaba como presidente, tuve que pedir una licencia en ese tema para registrarme como entrenador, porque mi mundo está en la cancha, me apasiona más ser entrenador que directivo”, delcaró en una entrevista con Mediotiempo.
Sergio Buenos vende casas para mantener a Colima FC
Además, Bueno también contó cómo sostiene económicamente a Colima FC: “Digamos que el 90% de lo que cuesta operar al equipo lo pongo yo como empresario, que tengo una empresa constructora; que construyo y vendo casas para meterle acá al equipo de futbol, pero no me pesa hasta el momento. No es que no reconozca que de fondo no estoy haciendo bien, porque debería buscar las formas de volver al equipo rentable, pero finalmente así estoy hasta el momento, seguimos luchando por darle mayor robustez a nuestro club, que nos pueda permitir poder comercializar al equipo”.