Se terminó el invicto de Cruz Azul en el Apertura 2024 tras la derrota frente a Atlético San Luis por 3 a 1 en el Estadio Alfonso Lastras Ramírez. Aunque el equipo de Martín Anselmi tuvo una buena actuación en el primer tiempo, en el segundo se quedó sin gasolina. Y es que el hecho de haber jugador muy seguido le jugó una mala pasada a una plantilla que ya había tenido problemas en la previa a enfrentar a León.
Lo concreto es que La Máquina se vio superada por su rival y terminó llevándose un resultado negativo que fue tomado como un golpe de realidad. De todas formas, durante el desarrollo del juego se produjeron algunas polémicas arbitrales que podrían haber cambiado el curso del partido. Sin ir más lejos, en el segundo gol de San Luis marcado por Javier Güémez, Franck Boli le había cometido falta contra Erik Lira ya que el delantero lo impactó con su codo en el aire.
Aún así, una de las grandes controversias fue el golpe en el rostro que le dio Aldo Cruz a Jorge Sánchez a los 22 minutos del primer tiempo. Cuando el futbolista de San Luis salta para despejar un balón con la cabeza, termina cortándole la ceja al lateral de 26 años con el codo. Si bien el ex Porto pudo continuar dentro del campo, en el entretiempo tuvieron que darle 7 puntadas por la profundidad de la herida.
En el momento del impacto se generó una gran preocupación en todo Cruz Azul debido a que Sánchez se quedó tendido sobre el campo de juego sin mostrar respuesta. No fue hasta que llegó la asistencia médica que comenzó a levantarse por el golpe que había recibido. Incluso, hay dudas de que pueda estar disponible para el duelo frente a Chivas que se disputará el sábado.
El antecedente de Cruz Azul que enfurece a la afición
La realidad es que no es la primera vez que sucede algo similar durante el Apertura 2024. En la tercera jornada frente a Tijuana, Nacho Rivero también tuvo que recibir puntadas en el entretiempo después de haber recibido una criminal patada en la cabeza. A pesar de que dicha jugada era mucho más clara que la de Jorge Sánchez, en ninguna de ellas se decidió siquiera considerar una falta.
Teniendo en cuenta que en el segundo tiempo se expulsó a Gonzalo Piovi por doble amarilla tras cometer una falta en la mitad de cancha, la diferencia de rigurosidad es evidente. Además se suma el hecho de que en La Noria todavía duele el robo que recibió en la última final de Liga MX.