Nicolás Larcamón llegó a Cruz Azul con un enorme desafío: mantener el listón alto tras la conquista de la Concachampions y conseguir el tan preciado título de Liga MX. Consciente de la exigencia inmediata de títulos en La Noria, el técnico argentino tiene entre manos una tarea clave: definir dentro de la plantilla quiénes realmente tendrán lugar en su proyecto y darle salida a los que no.
Para ello, Larcamón decidió utilizar el primer amistoso ante Mineros no solo como ensayo táctico, sino también como banco de pruebas para jugadores que habían perdido terreno en el semestre pasado. Entre ellos, Andrés Gudiño, Carlos Vargas y Giorgos Giakoumakis, delantero griego que llegó como esperanza de gol, pero cuya continuidad ahora está en duda.
En Zacatecas, Larcamón le habría dado minutos a Giakoumakis con la intención de evaluar si merece seguir en el equipo o si es momento de buscarle salida para liberar un cupo de extranjero (a la espera de Luka Jović como fichaje estelar). Sin embargo, el griego no logró destacarse y, salvo por un cabezazo desviado al inicio del juego, pasó prácticamente inadvertido.
La reacción de la afición cementera no tardó en hacerse sentir en redes sociales. Desde los primeros minutos tras el amistoso, se llenaron de mensajes críticos hacia el delantero griego. Para muchos, su falta de impacto en la cancha refleja que su ciclo en La Noria ha llegado a su fin.
La afición de Cruz Azul reaccionó al partido de Giorgos Giakoumakis en redes sociales
“Parece que ya no está cómodo, creo que se quiere ir”, escribió un seguidor en X, reflejando la percepción de que el atacante luce desconectado del proyecto celeste. Otros se mostraron más contundentes: “No sirve, solo se la vive quejándose en el suelo”, posteó otro, criticando su escasa participación y sus constantes caídas en el campo de juego.
La frustración es evidente, sobre todo porque Giakoumakis llegó como una apuesta importante. Sin embargo, en lugar de consolidarse, su desempeño ha dejado más dudas que certezas: “Se esperaba mucho de él, pensó que venía de vacaciones. Cuando le dijeron México pensó en la playa, pero le están exigiendo lo que costó y no le está pareciendo. No está desquitando el sueldo. Calidad la tiene… le falta mentalidad para comerse la liga”.
“Jugó con unas ganas como si quisiera que lo mandaran al Mazatlán”, ironizó otro aficionado. Incluso, algunos proponen su regreso a Estados Unidos como una solución viable: “Giorgos ni contra un equipo de Liga de Expansión deja de centrarse más en competir en lo físico, que de involucrarse en el juego asociativo. Creo que sí le vendría bien regresar a la MLS al buen Giakoumakis”.